Nadie sabe lo que hace, la hija del presidente, Ivanka Trump en la Casa Blanca

Más de 100 días han pasado ya desde el 20 de enero de este mismo año, jornada en la cual Donald Trump, el polémico y popular magnate de los negocios juraba su cargo como Presidente número 45 de la historia de los Estados Unidos. Desde entonces los Trump han estado en el ojo del huracán y cada detalle o declaración que realicen es investigada por los medios rápidamente.

En esta ocasión lo que llamo la atención fue una una importante reunión sobre el tráfico humano. Más de una foto se hizo pública mostrando un detalle que pronto se resaltó en las redes. Se trata del nombre y el título que cada uno poseía en la mesa, todos tenían su cargo específico menos la primera hija del presidente. Entonces todos se preguntaban qué estaba haciendo allí Ivanka. ¿Cuál es su empleo?

Si nos acercamos a la imagen, notamos que bajo el nombre de Ivanka Trump no aparece ningun cargo relacionado, mientras que todos los presentes si lo tienen, esto dio pie a criticas y claro a cuestionamientos, en los que se indicaba que se encontraba en la reunión solo por su lazo sanguíneo.

Junto a la imagen mostrada en los primeros párrafos se podrían destacar miles de retoques fotográficos de este pequeño cartel informativo añadiendo su función. En el de abajo podemos ver como su hipotético cargo sería el de “nacida rica”, haciendo burla y crítica de cómo ha podido llegar a ese puesto. ¿Hasta qué punto esto es gracioso?

Bromas aparte, lo cierto es que la “primera hija” del Presidente cambió a finales de marzo de este año de rumbo en su vida para convertirse en empleada del gobierno, según informó la Casa Blanca. Ivanka es desde entonces una empleada (una especie de consejera) activa en el ala oeste. Cuando los medios la cuestionaron directamente explicó sus verdadero propósito en este cargo.

Otro tema del que se ha estado hablando y denunciando públicamente ha sido la potencial violación de la ley de nepotismo vigente desde 1967, que dice que ningún cargo público (desde el jefe de Estado hasta un funcionario de bajo nivel) puede contratar o ayudar a un pariente. Pero en realidad esta ley señala que cualquier persona designada de esta manera (infringiéndola) “no tiene derecho a un salario” por el gobierno federal, por ende su cargo lo puede ejercer, pero sin cobrar nada a cambio, es decir, no puede percibir un sueldo.

Vía: Para los curisos