Antonio Banderas confirmó que durante enero pasado sufrió un infarto cardíaco que lo llevó a replantearse sus prioridades, y que lo motivó a cambiar por completo su estilo de vida. Su idea es seguir trabajando, pero hacerlo de forma más calmada y tranquila para cuidar de su salud y seguir haciendo lo que ama: actuar. Es decir, tendremos películas de Antonio, pero muchas menos de las habituales.
En una entrevista que le dio al medio español Diario Sur Banderas habló sobre este cambio de ritmo y su deseo de trabajar más como director:
“[V]oy a seguir trabajando, pero lo voy a hacer a otro ritmo. Me voy a dar espacio, me voy a pegar un tiempo entre producciones, y sobre todo voy a dar el salto que anhelo desde hace tanto tiempo: ponerme detrás de la cámara, escribir mis guiones, y eso me dará tiempo. Por ejemplo, hacer una película cada uno o dos años. Tranquilamente, y se pueden hacer películas magníficas desde Málaga, desde Madrid, desde Hollywood o desde la Conchinchina, que el mundo ya es global, muy global”.
Además, reveló que dejó de fumar de una sola vez, sin métodos graduales ni nada. Simplemente decidió que era hora de decir basta. Su experiencia después del infarto también debe de haber contribuido a este cambio de visión, especialmente después de que comentara en el festival de cine de Málaga que le habían implantado no uno sino que tres stents en las arterias coronarias.
“He llevado, casi sin darme cuenta, una vida a una velocidad que no era normal. Lo dije en la rueda de prensa. El año pasado yo decía que mi estado natural era el cansancio, no recordaba lo que era descansar y cuando lo hacía mi cuerpo se asustaba, y mi corazón me dijo basta”.
Lo bueno es que el conocido actor se dio cuenta a tiempo de que era necesario que parara un poco y se diera un descanso. Así tendremos Antonio Banderas para rato.
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VÍA UPSOCL