Este martes se presentó en la Cámara un proyecto que prohíbe la instalación y funcionamiento de granjas de pulpos en territorio nacional. La moción fue suscrita por Ana María Gazmuri, Gael Yeomans, Diego Ibáñez, María Candelaria Acevedo, María Francisca Bello, Emilia Schneider y Javiera Morales. El objetivo es anticiparse al avance de una industria que, según la literatura científica y la experiencia internacional, resulta cruel, insostenible y altamente contaminante.
Prohibición de granjas de pulpos en Chile: por qué lo pide la ciencia
Una revisión de más de 300 estudios elaborada por la London School of Economics (2021) concluyó que los pulpos poseen un sistema nervioso altamente complejo y son capaces de experimentar dolor y emociones, memorizar, razonar y aprender. En sistemas intensivos, la evidencia además muestra altísimas tasas de mortalidad: más del 96% en etapa larvaria y sobre el 50% en juveniles y adultos. A esto se suma el estrés por confinamiento que dispara conductas canibalistas, indicador claro de bienestar animal gravemente comprometido.
Prohibición de granjas de pulpos en Chile: impactos ambientales
Las granjas intensivas exigen grandes volúmenes de harina y aceite de pescado, presionando otras pesquerías y la biodiversidad marina. Los desechos ricos en nitrógeno y fósforo alteran ecosistemas costeros, fomentan floraciones de algas nocivas y deterioran hábitats críticos. Es decir, no solo hay sufrimiento animal: hay externalidades ambientales que terminan pagando los ecosistemas y las comunidades costeras.

Voces del Congreso y la sociedad civil
“Nuestro país no puede repetir los errores de modelos de producción que ya han demostrado ser crueles e insostenibles. Con este proyecto buscamos asegurar que Chile lidere en la protección de los animales y del medioambiente, prohibiendo de manera expresa la instalación y funcionamiento de granjas de pulpos”, afirmó la diputada Ana María Gazmuri.
En paralelo, más de 160 organizaciones entregaron en agosto una carta a la ANID pidiendo terminar el financiamiento público a líneas de investigación orientadas al cultivo de pulpos.
“Las granjas de pulpos son un modelo fallido, cruel y contaminante. En lugar de financiar proyectos que generan sufrimiento animal y degradación ambiental, Chile debe apostar por sistemas alimentarios sostenibles y éticos”, señaló Mayra Cabezas, coordinadora legislativa de Fundación Derecho y Defensa Animal, impulsora de la campaña “Salvemos a los Pulpos”.

Tendencia global: el mundo se mueve en la misma dirección
En 2024, California y Washington (EE. UU.) prohibieron estas prácticas, y existen iniciativas legislativas similares en Carolina del Norte, Connecticut, Hawái, Massachusetts, Nueva Jersey, Nueva York y Oregón. De prosperar la moción, Chile sería pionero en Latinoamérica, alineando su estándar con las mejores prácticas internacionales en bienestar animal y protección de océanos.
Qué cambia si se aprueba la ley
- Veto explícito a la instalación y operación de granjas de pulpos.
- Señal regulatoria clara para el mundo productivo: no habrá incentivos ni financiamiento público a un modelo intrínsecamente cruel y contaminante.
- Coherencia con compromisos ambientales y con la demanda ciudadana por sistemas alimentarios sostenibles y éticos.
Lo que viene
La iniciativa comienza ahora su trámite legislativo en comisiones. Con respaldo de evidencia y apoyo de organizaciones, el debate pondrá sobre la mesa dos preguntas simples: ¿queremos mares sanos? y ¿aceptamos modelos productivos que dependen del sufrimiento animal?. Si la respuesta es sí a lo primero y no a lo segundo, la prohibición de granjas de pulpos en Chile será un paso lógico y esperado.
Revisa el proyecto de ley
PROYECTO DE LEY QUE MODIFICA LA LEY GENERAL DE PESCA Y ACUICULTURA PARA PROHIBIR EL CULTIVO INTENSIVO DE PU… by lahuanche