Lula y Petro abogan por la soberanía de América Latina frente a acciones del Gobierno de EE.UU.
Los presidentes de Brasil y Colombia, Luiz Inácio Lula da Silva y Gustavo Petro, alzaron sus voces en un llamado coincidente a la unidad y la defensa de la soberanía de América Latina y el Caribe, frente a las recientes acciones militares y de presión por parte de Estados Unidos en la región. Lula, sin mencionar a Trump, defendió el derecho a la autodeterminación de Venezuela y Cuba.
Durante su intervención en el 16.° Congreso del Partido Comunista de Brasil (PCdoB), el presidente Lula da Silva fue contundente al afirmar que “el pueblo venezolanos es dueño de su propio destino y ningún presidente de otro país debe dictar cómo serán Venezuela o Cuba”. El mandatario brasileño denunció específicamente los ataques de EE.UU. a embarcaciones en aguas internacionales cercanas a Venezuela, realizados bajo el pretexto de la lucha antidrogas, y condenó la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo.
En un mensaje paralelo y reforzando el principio de no injerencia, el presidente Gustavo Petro utilizó su cuenta en la red social X para hacer un llamado urgente. “América Latina y del sur y el Caribe debe unirse ya para rechazar y reaccionar, más allá del discurso, contra cualquier agresión a la patria de Bolívar y al territorio latinoamericano y caribeño”, escribió. Petro fue enfático en aclarar que su postura “no es una defensa de Maduro, es la defensa de la soberanía latinoamericana”.
El presidente de Colombia fue más allá de la crítica diplomática y señaló los intereses económicos detrás de las acciones estadounidenses, acusando directamente a EE.UU. de buscar apoderarse del petróleo venezolano. El presidente colombiano añadió una grave denuncia sobre el costo humano, señalando que esta acción bélica se realiza “a costa de la vida de inocentes, como los pescadores de Trinidad y Tobago asesinados”.
El llamado a la unidad soberana se complementó con una reflexión del presidente Lula dirigida a la izquierda continental. Advirtió que debe realizar una autocrítica profunda y “dejar de hablar solo consigo misma” para conectar con las mayorías, señalando que el auge de la ultraderecha es una consecuencia de que la democracia no ha garantizado la igualdad y los derechos sociales. En conjunto, los pronunciamientos de Lula y Petro marcan un frente común estratégico que prioriza la soberanía colectiva y la crítica a la injerencia externa.