Santiago Sinfónico: Más de 40 mil personas disfrutaron del ciclo musical en Puente Alto, Estación Central, Maipú y Providencia

En Plaza Italia, centro neurálgico de la capital, se cerró el ciclo «Santiago Sinfónico» organizado por el Gobierno de Santiago y la Universidad de Chile, y que llevó la música de Carmina Burana a 4 puntos de la Región Metropolitana: Puente Alto, Estación Central, Maipú y Providencia, congregando en total a cerca de 40 mil personas. 

En el último de los conciertos, interpretados por la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile, dirigida por Rodolfo Saglimbeni, y el Coro Sinfónico Universidad de Chile, se reunieron más de 15 mil personas.

«Creemos que recuperar la ciudad para las personas también significa recuperar los espacios públicos para la gente y no para la delincuencia. Eso es lo que queremos hoy día», declaró el gobernador de Santiago, Claudio Orrego.

Por su parte, la Rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, recordó que «hace un año, cuando la música de la Novena Sinfonía de Beethoven llenó este espacio, y su mensaje de fraternidad alcanzó nuestro espíritu colectivo, nos propusimos volver. El emblemático concierto nos había remecido y supimos entonces que había un bien público que cuidar, ese que representa el saber encontrarnos como iguales en este espacio».

Carmina Burana recorriendo Santiago

El ciclo «Santiago Sinfónico» comenzó en el Parque Juan Pablo II, ubicado en Bajos de Mena, Puente Alto, un lugar que según sus propios habitantes, era la primera vez que recibía un espectáculo como este: «Me pareció maravilloso que estuvieran aquí porque nunca traen este tipo de música y a mí me encanta la música clásica», contó Lorena, vecina del lugar.

Cuatro mil personas llegaron a este primer encuentro, lo mismo que para el segundo concierto en Estación Central, donde el escenario estuvo instalado en el frontis de la tradicional estación de trenes y que paralizó por algunas horas la concurrida Alameda para que el público se detuviera y disfrutara del espectáculo.

«Hace algunos años acá había 600 toldos y mafias organizadas. Hoy podemos disfrutar de un concierto de primer nivel», dijo Felipe Muñoz, alcalde de la comuna que dio pase a la tercera presentación, en un icónico espacio: el Templo Votivo de Maipú. 

Hasta la comuna ubicada en el surponiente de la capital llegaron más de 15 mil personas, quienes también disfrutaron de Carmina Burana.

Todas las presentaciones estuvieron a cargo de la Orquesta Sinfónica Nacional de Chile y el Coro Sinfónico Universidad de Chile, dirigidos por el maestro Rodolfo Saglimbeni y Juan Pablo Villarroel, respectivamente, y las voces de los premiados y reconocidos solistas, la soprano Tabita Martínez, el contratenor Moisés Mendoza y el barítono Patricio Sabaté, conformando un grupo de más de 150 personas en escena.

A la cuarta cita, convocada en el corazón de Santiago, también llegó público de todo el país, como Mario Barahona, de Rancagua, quien dijo estar «bastante interesado por este tipo de música, lo había visto anteriormente, pero pienso que esto es un espectáculo para toda la ciudad, para toda la gente, y aunque sea de provincia, yo considero que uno tiene que aprovecharlo, porque son maravillas que uno puede tener dentro de la ciudad».

En tanto, Gabriela, vecina de la comuna de Providencia, contó que vino al espectáculo para «aprovechar primero la oportunidad de ver una obra de esta envergadura, que sea gratuita, abierta al público en general, y luego, para empezar a recuperar los espacios de la ciudadanía».
 
Finalmente, Verónica, de la comuna de La Florida, agradeció que se realicen eventos como éste y afirmó que «es lo mejor que se les pudo haber ocurrido, porque acercan a toda la gente a la cultura. No todos tienen el acceso a pagar una entrada al teatro, escuchar buena música, ver ópera. Entonces yo encuentro que lo que hicieron es súper».

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