Caso Neruda: Este martes inicia panel internacional de expertos que podría determinar que el poeta fue asesinado

La hipótesis del asesinato del poeta- tras recibir una inyección en el estómago de una sustancia venenosa- fue planteada en 2011 por Manuel Araya, su último chófer y la única persona, junto con Matilde Urrutia –su esposa–, que le acompañó en todo momento durante los últimos días de su existencia.

Por Leonardo Buitrago

24/01/2023

Publicado en

Actualidad / Chile / Portada

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En septiembre se cumplen cincuenta años del fallecimiento del poeta Pablo Neruda, sin embargo, las circunstancias de su muerte aún no son claras, aunque el certificado de defunción indica que fue producto de un estado de “caquexia” provocado por el cáncer de próstata, investigaciones judiciales y científicas apuntan a que fue envenenado.

En 2017 el ministro de la Corte Suprema, Mario Carrozza, ordenó la exhumación de su cuerpo y tras años de estudios y análisis, un panel internacional de expertos presenta desde este martes y hasta el 3 de febrero en la Corte Suprema los resultados de la investigación sobre las causas de la muerte del Premio Nobel de literatura, ocurrida la noche del 23 de septiembre de 1973.

“Pablo Neruda fue asesinado y la orden vino de Pinochet”

La hipótesis del asesinato del poeta- tras recibir una inyección en el estómago de una sustancia venenosa- fue planteada en 2011 por Manuel Araya, su último chófer y la única persona, junto con Matilde Urrutia –su esposa–, que le acompañó en todo momento durante los últimos días de su existencia.

El 8 de mayo de ese año , la revista mexicana Proceso publicó un reportaje de su corresponsal en Chile, Francisco Marín, titulado “Pablo Neruda fue asesinado”, el cual se basó en una entrevista realizada en noviembre de 2011, en la playa chilena de Cartagena, en la que Manuel relató su versión de lo sucedido aquel domingo 23 de septiembre de 1973.

Según el testimonio del asistente de Neruda, todo estaba dispuesto para que Pablo Neruda se exiliara en México. Había viajado de su casa en Isla Negra a Santiago de Chile y un avión enviado por el gobierno mexicano estaba listo para recogerlo. Sin embargo, tuvo que ser internado en la clínica Santa María. Avisó por teléfono a su mujer, Matilde Urrutia, y al propio Araya, que un médico le había puesto una inyección en el estómago. Unas horas después murió.

«Entonces Neruda nos pidió a mí y a Matilde que viajáramos a Isla Negra a buscar sus cosas más importantes, entre éstas sus memorias inconclusas. Creo que eran Confieso que he vivido. Al día siguiente -23 de septiembre- partimos temprano hacia la casa de Isla Negra. (…) Dejamos a Neruda muy bien en la clínica, acompañado por su hermana Laurita, que llegó ese día a acompañarlo», plantea el reportaje.

Según Araya, el premio nobel estaba «en excelente estado, tomando todos sus medicamentos. Todos eran pastillas, no había inyecciones. Nosotros nos preocupamos de recoger todo lo que nos indicó. Estábamos en eso cuando Neruda nos llamó como a las cuatro de la tarde a la hostería Santa Elena, donde le dieron el recado a Matilde, quien devolvió la llamada. Neruda le dijo: ‘Vénganse rápido, porque estando durmiendo entró un doctor y me colocó una inyección’.

«Cuando llegamos a la clínica, Neruda estaba muy afiebrado y rojizo. Dijo que lo habían pinchado en la guata (el estómago) y que ignoraba lo que le habían inyectado. Entonces le vemos la guata y tenía un manchón rojo», relató.

Araya indicó a Marín que momentos después, cuando se estaba lavando la cara en el baño, entró un médico que le dijo: «Tiene que ir a comprarle urgente a don Pablo un remedio que no está en la clínica», por lo que salió a comprar el medicamento, mientras Neruda se quedó con Matilde y Laurita.

«En el trayecto me siguieron sin que yo me diera cuenta. El médico antes me había dicho que el medicamento no se encontraba en el centro de Santiago, sino en una farmacia de la calle Vivaceta o Independencia. Cuando salí por Balmaceda para entrar a Vivaceta aparecieron dos autos, uno por detrás y otro por delante. Se bajaron unos hombres y me pegaron puñetazos y patadas. No supe quiénes eran. Me cachetearon harto y luego me pegaron un balazo en una pierna (…) Después de todo lo que me pegaron terminé muy mal herido en la comisaría Carrión, que está por Vivaceta con Santa María. Luego me trasladaron al estadio Nacional donde sufrí severas torturas que me dejaron a un paso de la muerte. El cardenal Raúl Silva Henríquez logró sacarme de ese infierno. Por eso estoy vivo», narró.

Neruda murió a las 22:00 horas en su habitación -la número 406- de la clínica Santa María.

Para Manuel Araya no existe duda alguna: “Neruda fue asesinado”. Y sostiene que la orden vino de Augusto Pinochet: “¿De qué otra parte iba a salir?”.

Sostiene que la Junta Militar ordenó el asesinato, ejecutado a través de aquella inyección, a fin de impedir que el poeta viajara a México. 

Tanto la existencia de dicha inyección como del avión mexicano han sido confirmadas por la investigación llevada por el juez Mario Carroza, tal como destaca el informe del PDH, que valida plenamente la tesis de Araya.

La inyección ya aparecía mencionada en una nota del diario El Mercurio, el 24 de septiembre de 1973, donde además se menciona que ésta le provocó un posterior infarto. Pero nunca más se habló de eso.

Investigación judicial

Los abogados Eduardo Contreras, quien en representación del Partido Comunista de Chile interpuso el 31 de mayo de 2011 la querella criminal que dio origen a la investigación judicial, y Rodolfo Reyes, sobrino del poeta, consideran probado lo esencial del testimonio de Araya y concuerdan en que efectivamente, agentes de la dictadura del general Pinochet acabaron con la vida del premio nobel de Literatura de 1971.

El 8 de abril de 2013 se realizó la exhumación de sus restos, sepultados desde diciembre de 1992 en Isla Negra. A partir de ellos, científicos de Chile, España y Estados Unidos elaboraron nueve informes diferentes, y se celebró una reunión del grupo de expertos en toxicología a fines de aquel año.

En mayo de 2015, un documento del Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior entregado al juez Mario Carroza planteó: “Resulta claramente posible y altamente probable la intervención de terceros en la muerte de D. Pablo Neruda”.

“Desde el punto de vista probatorio, es posible concluir que (…) no se estableció en su momento, ni tampoco durante el curso de la investigación, que la muerte (de Neruda) se haya producido a consecuencia del cáncer que sufría”, señala el informe en sus conclusiones.

Allí se establece además que “de haber existido la intervención de terceros, ésta habría consistido en la inoculación, mediante una inyección en el abdomen del poeta, durante su estancia en la Clínica Santa María, de sustancias aún no determinadas en la investigación, y que le habrían producido la muerte aproximadamente seis horas más tarde”.

En octubre de 2017, en el último encuentro del panel internacional en Santiago de Chile, los especialistas en genómica y proteómica contrastaron sus conclusiones y determinaron que Neruda no falleció a consecuencia de un estado de caquexia derivado del cáncer de próstata, como indica el certificado de defunción.

Asimismo, revelaron el hallazgo en algunas de sus muestras dentales y óseas de ADN con Clostridium botulinum, cuya toxina es la responsable del botulismo. Debido a que este bacilo se halla, por lo general, en la tierra y su presencia en los restos del poeta podría obedecer a una contaminación externa, a un envenenamiento por ingesta de alimentos o a una cepa manipulada en laboratorio y recibida vía sistémica, los científicos recomendaron que se analizaran muestras adicionales de los sedimentos de la parte superior de la tumba.

Los laboratorios de las universidades de Copenhague (Dinamarca) y McMaster (Canadá), a partir de diversos estudios genómicos, proteómicos y microbiológicos de una parte de los restos del poeta, evaluaron estas muestras.

Asimismo, los datos genéticos producidos por ambos laboratorios pasarían a ser examinados por el doctor Charles H. Brenner, de la Universidad de Berkeley, gran especialista en matemática forense, señaló el periodista Mario Amorós en su artículo ¿Fue asesinado Neruda por agentes de Pinochet?, publicado por La Vanguardia, en mayo de 2021.

Los tres informes se contrastarán en la reunión del panel internacional de expertos, y se trasladarán sus conclusiones definitivas a la magistrada Paola Plaza, designada para reemplazar a Mario Carroza en la instrucción del expediente del caso Neruda, tras la designación de este como miembro de la Corte Suprema.

Familiares de Neruda esperan con dignidad y entereza los resultados

Los familiares de Pablo Neruda señalan que «esperan con dignidad y entereza la entrega de los resultados del panel internacional de expertos», tras más de una década de acuciosa investigación judicial, complejas pruebas científicas con tecnología de última generación y trabas y obstáculos por parte de entidades públicas y privadas.

Señalan que las pruebas existentes demuestran que el poeta no murió a consecuencia del cáncer de próstata que se estaba tratado, por lo que los hechos y circunstancias que rodearon y desencadenaron su fallecimiento, tan sólo a 12 días después del golpe militar del año 1973, podrían despejarse definitivamente.

A continuación, el texto íntegro:

Los sobrinos de Pablo Neruda – hijos de Rodolfo Reyes Candia, nos querellamos en esta investigación criminal iniciada el año 2011, cuyo objetivo es establecer y dilucidar la real causa de muerte de Neruda: muerte natural- como sostenía su certificado defunción, o intervención de terceros con propósito homicida.

En octubre 2017- cerca de 6 años- se estableció la falsedad ideológica del Certificado de Defunción de Pablo Neruda, ya que NO murió a consecuencia del cáncer de próstata que se estaba tratando.

Llevamos más de once años de investigación, la que ha tenido grandes dificultades de avance, debido a trabas y entorpecimientos provenientes de entidades públicas y privadas, así como retardos y demoras ajenas a nuestra actuación como abogados impulsores.

Esta imperiosa necesidad de indagar los hechos y circunstancias que rodearon y desencadenaron la muerte de Pablo Neruda, ocurrida el 23 de septiembre, tan sólo a 12 días después del golpe militar del año 1973, está llegando a puerto…

La investigación criminalística forense, desarrollada por prestigiosos Laboratorios de Canadá y Dinamarca y otros peritos de Estados Unidos y España, se suman a otras previas, que nos permitirá mencionar que hoy contamos con la tecnología más avanzada del planeta, sistema de Next Generation Secuency, NGS.

Los resultados de sus pericias y categóricas conclusiones, serán entregados por este Panel de expertos forenses Internacionales, al tribunal que sustancia esta causa, una vez finalizado el Panel, el 03 de Febrero 2023 .

Hechos acreditados a la fecha :
1.- Pablo Neruda, no murió de cáncer. No murió de caquexia. Estaba en tratamiento contra el cáncer de próstata.

2.- El Certificado de Defunción de Pablo Neruda, es ideológicamente FALSO.

3.- El día en que murió Pablo Neruda, según el Doctor Sergio Drapper Juliet, éste habría entregado el turno al “Doctor Price “,quedando Pablo Neruda bajo su cuidado en la Clínica Santa María, en el piso 4, en la ciudad de Santiago de Chile.

Este personaje surge sólo a través de declaraciones del Doctor Sergio Draper Juliet, cuando éste fue llamado a declarar al tribunal, en 3 ocasiones.

Es públicamente contradictorio, ya que, en el 1973, al morir Neruda jamás fue señalado, mencionado o anunciado como médico de esa Clínica, en ningún medio de comunicación hablado o escrito. No existió entonces ningún facultativo en Chile con ese apellido, ni chileno ni extranjero.

4.- Como sobrinos de Pablo Neruda, al igual que el mundo de la letras y la cultura- internacional y nacional -esperaremos, con dignidad y entereza la entrega de resultados del Panel de Expertos Internacionales, y señalamos desde ya nuestro reconocimiento al avance y contribución de la ciencia forense, por la ardua labor desarrollada por los peritos . Así,

RODOLFO REYES M. ELISABETH FLORES P.
Abogado Abogada
Sobrino de Pablo Neruda

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