PDI deberá determinar el origen y monto total de los bienes

Elevado patrimonio de obispo evangélico motiva investigación de la Fiscalía de Alta Complejidad

En 2017 se dio inicio a una investigación, de carácter reservado, para determinar eventuales delitos de lavado de dinero o infracciones tributarias, debido al alto patrimonio exhibido por Eduardo Durán.

Un reportaje publicado por el diario La Tercera señala que a fines de 2017, la Fiscalía de Alta Complejidad de la zona oriente dio inicio a una investigación de carácter reservado, para determinar eventuales delitos de lavado de dinero o infracciones tributarias, debido al alto patrimonio exhibido por el obispo evangélico Eduardo Durán.

«Un Mercedes Benz S500, de un valor cercano a los $ 88 millones, es el vehículo de que dispone la Primera Iglesia Metodista Pentecostal para el obispo Durán (76 años)», señala el reporte, donde se indica que, además, la máxima autoridad de la catedral evangélica es dueño -a título personal- de ocho vehículos más, entre ellos, dos modelos Ford de colección de los años 20, y 12 propiedades que, según señala su información comercial, poseen un avalúo fiscal de $ 1.152 millones, cifra que podría duplicarse si se considera el precio del mercado.

En esta línea, según fuentes de la indagatoria, el fiscal jefe de la unidad, Felipe Sepúlveda, al mando de las pesquisas, encomendó a la Policía de Investigaciones determinar el origen y monto total de los bienes del pastor evangélico.

Aunque ya han realizado varias diligencias, no se han solicitado hasta el momento medidas como el acceso a cuentas corrientes o intervenciones telefónicas. Tampoco se ha ampliado la investigación al hijo del obispo, el diputado RN Eduardo Durán, quien también registra un alto monto en bienes raíces: unos $ 640 millones en avalúo fiscal según su declaración de patrimonio y $ 1.031 millones según información comercial de Dicom.

Sin embargo, en el caso del parlamentario, explican cercanos a la investigación citados por La Tercera, este tiene título profesional de ingeniero civil y una empresa, con la que podría justificar sus ingresos. No así el religioso, quien solo registra una participación del 25% en la empresa de insumos tecnológicos para la minería Innovaciones Descontaminantes Indesc, sociedad que constituyó en 2014 junto a otros pastores.

Así, los antecedentes de la situación de Durán ya están en manos de la subdirección de Fiscalización del Servicio de Impuestos Internos, incluyendo el dato de que el obispo poseía a su nombre una propiedad dedicada a culto, en la comuna de Pudahuel, que él mismo vendió posteriormente a la Iglesia Metodista.

En ese sentido, añade el reporte, los sitios dedicados a culto religioso, entre otros beneficios que les da la ley, están exentos de pago de impuesto territorial, tampoco tributan por los servicios que venden a la comunidad, y están exentas las donaciones que reciben para mejorar la infraestructura, así como el ingreso que reciben los pastores (y los sacerdotes en el caso de la Iglesia Católica), el que no se considera renta.

No obstante, en un hecho inédito, el SII emitió el 13 de octubre de 2017 una resolución que obliga a las organizaciones sin fines de lucro a presentar ante el servicio una declaración jurada anual sobre ingresos, desembolsos y otros antecedentes como libros de contabilidad.

El dictamen, que rige para todas las organizaciones no gubernamentales y fundaciones, menciona expresamente a las corporaciones y organizaciones religiosas que obtengan ingresos anuales por dinero o especies superiores a 12.000 UF ($ 325 millones). Las primera rendición de este tipo debe ser realizada a más tardar el último día hábil de junio de este año, concluye la nota.

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