Verguenza nacional: cuestionados ministros de Piñera dejan gabinete para postularse como constituyentes

Cristián Monckeberg y Antonio Walker , quienes como ministros no supieron resolver las injusticias que aquejan a los chilenos ni dar respuesta a la crisis de institucionalidad que afronta el país, ahora aspiran a formar parte de la Convención Constitucional que se encargará de redactar la nueva Carta Magna.

Por Leonardo Buitrago

06/01/2021

Publicado en

Chile / Política / Portada

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Sebastián Piñera anunció este miércoles un nuevo cambio de gabinete, el séptimo en su mandato y en plena crisis por la pandemia del COVID-19, luego que dos de sus secretarios de Estado renunciaran para postularse a la Convención Constitucional.

El ministro secretario general de la Presidencia, Cristián Monckeberg, dejó su cargo y fue reemplazado por Juan José Ossa, quien ya juró como nuevo titular de la cartera.

Por su parte, Antonio Walker renunció al despacho de Agricultura y María Emilia Undurraga asumió como nueva titular del ministerio.

Piñera agradeció a los ministros salientes por su labor “valiosa y fecunda”, y les deseó «el mayor de los éxitos como futuros convencionales«.

Además dio una bienvenida a los nuevos ministros que se incorporan al gabinete, deseándoles lo mejor en los “enormes desafíos” en la recta final de su gobierno, cuya aprobación ronda el 7% y desaprobación supera el 83%, según las más recientes encuestas

En el caso del Ossa, sostuvo que entre sus tareas como ministro secretario general de la Presidencia deberá “combatir con eficacia y decisión la pandemia del coronavirus”, “fortalecer el orden público y seguridad ciudadana” y “garantizar un proceso constituyente ejemplar”, entre otros.

Como nueva jefa de la cartera de Agricultura, Piñera indicó que María Emilia Undurraga  deberá “seguir impulsando la transformación de Chile en una potencia agroalimentaria” y “fomentar la tecnificación y diversificación de nuestra agricultura, promover el pleno desarrollo del mundo rural”.

Asimismo le encomendó la tarea de “asegurar que el recurso de agua no se convierta en un freno o cuello de botella” y agregó que su cartera deberá “enfrentar una nueva temporada de incendios forestales”.

Cuestionados ministros quieren ser constituyentes

Cabe destacar, que este cambio de ministros se produjo a cinco días de que expire el plazo legal para inscribir candidaturas a la Convención Constitucional y ,tras las gestiones de los partidos de Chile Vamos con el presidente Sebastián Piñera para impulsar la participación de figuras del gabinete en los comicios del próximo 11 de abril, lo que ha causado indignación y generado críticas, ya que estos mismos actores han participado en las decisiones, acciones y agendas políticas que profundizaron la crisis y desigualdad en Chile

Este es el caso de Cristián Monckeberg y Antonio Walker , quienes como ministros no supieron resolver las injusticias que aquejan a los chilenos ni dar respuesta a la crisis de institucionalidad que afronta el país. Un escenario que desencadenó el estallido social de finales de 2019 y el desarrollo de una nueva Constitución política, tal y como se aprobó con más del 78% de los votos en el plebiscito del pasado 25 de octubre.

Cabe recordar que en julio pasado, Monckeberg se encargó de hacer lobby en el Congreso junto con Ignacio Briones y Claudio Alvarado para convencer a los parlamentarios oficialistas para que rechazaran la iniciativa del proyecto de retiro del 10% de los fondos de capitalización individual de las AFP de modo excepcional por la pandemia.

Posteriormente, ante la eventual aprobación del proyecto de un segundo retiro, presentado por diputados de la oposición, el entonces ministro secretario general de la Presidencia se encargó de promover la propuesta de La Moneda, que finalmente fue aprobada.

Por su parte, Antonio Walker en su gestión como ministro de Agricultura se dio a la tarea de implementar junto con las empresas madereras, una serie de medidas que apuntan a perpetuar el cuestionado modelo de monocultivos forestales, pese al acreditado daño ecológico, económico y social que éste ha provocado.

Así lo denunció a finales de octubre pasado la doctora en Ecología de la Universidad de Chile, Fernanda Salinas, en una investigación publicada en exclusiva por El Ciudadano.

En su informe, Salinas planteó que luego de los devastadores incendios del año 2017, que dejaron un saldo de cerca de 600.000 hectáreas afectadas, once personas fallecidas y más de 1.500 viviendas destruidas, se han seguido generando mecanismos para continuar con el financiamiento público, por vías innovadoras y de cuestionable legalidad,  a las plantaciones forestales que sustentan el lucrativo negocio de las madereras.

A raíz de la publicación de la investigación, el diputado Amaro Labra (PC), ofició al Ministerio de Agricultura, al Ministerio del Medio Ambiente y la Corporación Nacional Forestal (CONAF), para que se pronuncieramn por las plantaciones de monocultivos para el plan de recuperación en las zonas de los incendios registrados en 2017.

En la comunicación dirigida a Walker, el legislador solicitó detalles sobre el financiamiento y ejecución de los recursos de cada cartera en materia de forestación y reforestación de 2017 a la fecha.

Así como del financiamiento propuesto en materia de forestación y reforestación para el 2021 y la entidad que ejecutará los recursos; del financiamiento y ejecución del Fondo Forestal y Maderero de 2017 a la fecha, y sobre los detalles del convenio CORMA – CONAF y su ejecución a la fecha.

A pesar de este historial, tanto Monckeberg como Walker ahora aspiran a formar parte de la Convención Constitucional que se encargará de redactar la nueva Carta Magna, en las que millones de chilenos y chilenas han depositado sus esperanzas para construir un país con mayor justicia e igualdad.

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