Öcalan, la Confederación Democrática y los 31 años del PKK del Kurdistán

Desde su encierro solitario en la prisión de Imrali, el líder del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), elaboró, hace casi diez años, un plan para empezar a encontrar una salida pacífica a la cuestión kurda

Por Wari

14/12/2009

Publicado en

Actualidad / Pueblos

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Desde su encierro solitario en la prisión de Imrali, el líder del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), elaboró, hace casi diez años, un plan para empezar a encontrar una salida pacífica a la cuestión kurda. El plan incluye a otros pueblos de la región.

Hay un dicho entre los dichos que dice que “la soledad es mala consejera”, pero parece que para algunos, los dichos son solo dichos.

Abdullah Öcalan (en la foto) purga una condena desde hace diez años en la prisión de Imrali, en la isla turca del mismo nombre. En toda la cárcel, el único preso es él.

En esa soledad que solo comparte con libros, recuerdos y deseos, Öcalan fue charlándose de algunas cosas. Por ejemplo, se charló acerca de que el campo socialista había caído; que el capitalismo sigue fuerte, que la organización que creó junto a otros muchachos, también estaba fuerte y se hacía cada vez más grande; que el conflicto armado entre la guerrilla del PKK y el ejército turco estaba dejando muchas muertas (40 mil); que el modelo de países inventados por Francia e Inglaterra luego de la primera guerra mundial había fracasado; que entonces, luchar por un Kurdistán independiente era caer en ese juego, y que, mejor que insistir en una derrota anunciada, era proponer otra propuesta.

Así, en esa reclusión solitaria, la soledad se hizo la única compañera y una inevitable oreja receptora de ideas. Entonces, entre charlas de entre mesa, nació la idea de establecer en la región comprendida por la Anatolia y Medio Oriente, una Confederación Democrática.

ANATOLIA Y MEDIO ORIENTE

En la primera guerra mundial, el imperio Otomano, aliado a Alemania, fue derrotado. Dos de los imperios triunfantes, el inglés y el francés, se repartieron el botín de Medio Oriente. Impusieron sus caprichos sobre el imperio aplastado, obligándolo primero, y bajo influencia de los Estados Unidos de Arriba, a otorgarles autonomía a los kurdos que luchaban por ella desde hacía más de un siglo.

Pero la autonomía kurda fue apenas un recreo. El imperio Otomano se rehizo en república de Turquía, su ejército se repuso de la derrota, y comenzó a negociar con las potencias que lo habían derrotado. Así es que la autonomía kurda se diluyó. En vez de libres e independientes, su territorio fue repartido entre el antiguo imperio Persa (Irán), las recientemente creadas repúblicas de Siria e Irak (antes Arabia), y Turquía.

Pero no solo el pueblo kurdo sufrió fraccionamiento. En ese tiempo de pos guerra mundial, el territorio de Armenia, fue reducido a una pequeña porción de tierra y su pueblo, antes masacrado por los otomanos, ahora era confinado a ese pequeño espacio.

Las potencias internacionales que tanto demoraron en presionar al estado turco para que reconozca el genocidio que cometió sobre el pueblo armenio (cosa que nunca hizo, ni tampoco fue sancionado por eso), siguen demorando el reconocimiento del pueblo kurdo como preexistente a la conformación de los estados naciones antes nombrados.

En ese sentido, también se habla bajito de la invasión turca a Chipre (antigua colonia inglesa), en cuyos bancos las grandes empresas turcas lavan su dinero.

A esta situación, se agrega la cuestión de Palestina, país fragmentado mediante una resolución ajena, elaborada por las mismas potencias que diseñaron el fraccionamiento de Arabia y partieron a Kurdistán en cuatro partes.

La creación del estado de Israel sirvió para apostar una base imperialista en Medio Oriente. En una región donde los pueblos vivían armónicamente sus costumbres y tradiciones, occidente generó un conflicto. Los palestinos dejaron de ser agricultores para pasar a ser desalojados, mientras que sus vecinos de siempre, los judíos, pasaron a hacer el papel de usurpadores de una tierra a la que siempre fueron convidados a vivir.

El modelo de estado-nación fracasó. Esa es la conclusión a la que llegó Öcalan hablando con su soledad. Porque es un modelo de fragmentación, que generó choques que favorecen a los traficantes de armas que provienen de las mismas potencias que orquestaron esas fragmentaciones. Entonces, los pueblos se entretienen matándose entre ellos, mientras las empresas capitalistas del mundo occidental les chupan el petróleo, el agua, sus minerales, sus tierras fértiles y sus fuerzas de trabajo.

Por eso, en la Anatolia y Medio Oriente, donde, desde los tiempos, decenas de pueblos vienen coexistiendo, Öcalan propone establecer una Confederación Democrática.

LA CONFEDERACIÓN DEMOCRÁTICA

El PKK viene intentando una salida pacífica al conflicto armado desde hace, al menos, una década. Fueron varios los alto al fuego que, unilateralmente, declarara la organización. Pero la guerra sigue, porque sigue el enriquecimiento de los comandantes turcos que hacen negocios con ella. Y entre tanto, el gobierno, con la continuidad del conflicto, tiene un enemigo visible al cual echarle todas las culpas cuando ya no hay respuestas a sus erradas políticas.

La lucha del ejército turco con el PKK, posibilita al gobierno turco, reforzar la idea de un nacionalismo racista, una idea que se enseña en las escuelas como “superior” a otras nacionalidades. Para agregarle más condimentos, con esta guerra, Turquía sostiene estrechos lazos de amistad con potencias como Alemania y Francia, a quienes les compra armas; e inicia relaciones conyugales con España, solidarizándose con el estado español en su lucha contra la organización vasca ETA.

Ese discurso y esas políticas, son apenas parte de la diplomacia turca para ganar votos a la hora de entrar a la tan mentada Unión Europea.

Todo esto el PKK lo sabe. Y no quiere darle más excusas a sus perseguidores y carceleros.

El 15 de noviembre de este año, El Periódico de Catalunya, publicaba una entrevista que Andrés Mourenza hiciera con dos líderes (una mujer y un hombre) del PKK en el Kandil. Allí el comandante Bozan Tekin dice: “El sistema de los estados-nación ha sido superado. Fue un sistema impuesto por Europa a Oriente Próximo, que no ha funcionado porque esta región es un mosaico de culturas. Por eso el PKK está en contra de un estado nacional (para los kurdos). Lo que apoyamos es una solución confederal que nos garantice a vivir de forma libre y democrática.”

Es decir, la Confederación Democrática sigue siendo un sueño de libertad, solo que más ampliado. Ya la lucha del PKK no es solamente para el pueblo kurdo. La lucha del PKK, que jamás se volcó contra el pueblo turco, sino contra las políticas expansionistas de su gobierno y ejército, se ha vuelto claramente internacionalista, defendiendo la intercultural interétnica tan avasallada por los malos gobiernos.

KURDISTÁN: PKK CELEBRÓ 31 AÑOS DE VIDA

El pasado 27 de noviembre, las y los militantes del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), sus adherentes y simpatizantes, conmemoraron un nuevo aniversario de la fundación de la organización con fiestas en distintos puntos del territorio Kurdo y de Europa. Entre tanto, las mujeres, desde hacía una semana, venían haciendo de sus cuerpos pancartas vivas para decir “basta” a la violencia contra ellas.

En 1978, sobre una tierra llamada por los de abajo como “Kurdistán”, y denominada por los de arriba como el “Sureste de Turquía”, un grupo de estudiantes universitarios fundaba el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK).

La fundación tuvo lugar en un pueblo llamado Fis, en la provincia kurda de Amed. Seis años después, el 15 de agosto de 1984, esos jóvenes atacarían, simultáneamente, dos cuarteles policiales dando inicio a una guerra contra las fuerzas represivas turcas que perdura hasta el día de hoy.

Con el tiempo, otras organizaciones revolucionarias como Kawa, Tekoşin, KUK, Rizgarî y DDKD, se fueron sumando al PKK.

En 1980 el ejército turco toma el poder mediante un golpe de estado. Es el quinto del siglo 20. Los anteriores fueron en 1908, con los “Jóvenes Turcos” y su idea nacionalista racista; en 1923 en la cual fundan la República de Turquía sobre las bases del imperio Otomano; 1960 y 1971. A partir de este último golpe (1980), comienzan las persecuciones a todos los oponentes políticos. La cárcel de Amed, famosa por el trato inhumano al que son sometidos los detenidos, se llena de kurdos.

Cuatro detenidos de esa cárcel, luego de una huelga de hambre en la que protestaban por el maltrato y las pésimas condiciones de alojamiento, deciden inmolarse prendiéndose fuego. Eran cuadros de la dirección del PKK. A partir de ese momento, el pueblo comienza a preguntar por esos jóvenes, a interiorizarse por la cuestión kurda, por la lucha de esa incipiente organización. El PKK comienza a hacerse cada vez más popular.

EL MARXISMO QUE LOS PARIÓ

La década en la que nació el PKK estuvo marcada, principalmente, por ejércitos guerrilleros que buscaban tomar el poder por asalto en sus respectivos países de origen. La idea era  la liberarse del oprobio imperialista, fundamentalmente de los Estados Unidos de América y sus lacayos locales, y establecer un gobierno revolucionario; socialista.

El PKK nació con ideas similares a esas, con la diferencia de que su lucha, no era contra un enemigo externo con cómplices nacionales, sino contra un gobierno y un ejército colonialista. Sin embargo, la luz de la historia, la caída del campo socialista en el mundo, cuyo único sobreviviente real es Cuba, constantes autocríticas, y la revolución permanente que surge del hecho mismo de escuchar al pueblo, ha modificado aquella idea inicial de expulsar, de territorio kurdo, al gobierno turco y su ejército.

Pero no, no es que hayan renunciado a su lucha de liberación, sino que la han hecho más amplia, más profunda, más radical, más utópica y más realizable: establecer una “Confederación Democrática”.

EL «TERRORISMO» DEL PKK

La paranoia represiva del gobierno de Bush y sus secuaces de la Unión Europea, declararon al PKK organización terrorista. Con esta ayudita, el gobierno turco (manipulado desde siempre por el ejército), obtuvo licencia para encarcelar y matar a discreción a todo sospechoso de pertenecer al PKK, o de tener ideas “separatistas”.

Pero a lo mejor Bush y sus secuaces no estaban tan equivocados. Veamos. Hagamos un breve repaso de los “actos terroristas” cometidos por el PKK en estos 31 años.

•    Primero empecemos por el primero: deciden fundar una organización que libere al pueblo kurdo de la colonia.
•    Luego, deciden que esa organización sea armada, para ello viajan a Palestina y se entrenan con la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), comandada por Yasser Arafat. Luego suben a las montañas de El Kandil, en la frontera que une Turquía con Irak, navegando en picos de más de tres mil metros de altura con temperaturas que en invierno llegan a los -20° C.
•    Deciden que quien entra a la guerrilla muere en ella.
•    Establecen una férrea disciplina: prohíben el sexo y la formación de parejas dentro de la organización.
•    Arman academias para que estudien los y las guerrilleras.
•    Las mujeres tienen mando. Hay equidad con los hombres.
•    Luchan contra el tribalismo que dividió al pueblo kurdo toda su historia.
•    No matan a sus rehenes ni los torturan.
•    A mediados de la década de 1980, cientos de sus militantes y adherentes deben exiliarse en Europa, perseguidos por su pensamiento.
•    En su tercer congreso, realizado en 1986, el PKK, que hasta entonces era un simple grupo guerrillero, decide convertirse en ejército, aunque sin abandonar la estrategia de guerra de guerrillas.
•    En 1987 el gobierno de Turquía  empezó a desarrollar una estrategia política en territorio kurdo llamada OHAL (situación inusual), la cual fue desarrollada en 13 ciudades. Esa “situación inusual” versó en dar vía libre al ejército, el cual, cometió crímenes de Lesa Humanidad en las poblaciones civiles. Es decir que, OHAL es, nada más y nada menos, que un golpe de estado “legal”.
•    Desde su nacimiento, el PKK tuvo su veta política legal. Todos esos intentos fueron, más temprano que tarde, prohibidos por el gobierno Turco; cientos de dirigentes fueron puestos en prisión u obligados a exiliarse. Veamos. En 1990, se funda el Partido del Trabajo del Pueblo (HEP), clausurado en 1993. Durante ese período, el HEP logra entrar al parlamento turco y darle representación a quienes perseguían una solución política legal a la cuestión kurda. Es en ese momento, cuando la diputada Leyla Zana, fue expulsada por hacer su juramento en lengua kurda. Había jurado que su trabajo parlamentario iba a ser tanto para kurdos como para turcos. Al clausurarse el HEP fundan el Partido de la Democracia (DEP), el cual sobrevive a la clausura hasta 1998. Ese año fundan el Partido de la Democracia del Pueblo (HADEP), se mantiene hasta el 2003 cuando es cerrado por el gobierno turco. Entonces fundan el Partido del Pueblo Democrático (DEHAP), clausurado en 2005. Entonces surge el Movimiento del Pueblo Democrático (DTH). Rápidamente, ese Movimiento se transforma en partido político. Nace el Partido de la Sociedad Democrática (DTP) en 2005. En 2009, el DTP ganó 100 puestos de gobierno en distintos puntos del territorio kurdo y turco.
•    El DTP tiene trabajo social no solo en territorio kurdo, sino también en ciudades netamente turcas como Estambul y Ankara, donde la precarización laboral no distingue procedencias.
•    El DTP trabaja con las mujeres, siendo de las pocas organizaciones en este suelo (podemos decir “suelo turco y kurdo”), que reivindica su presencia en la sociedad, exigiendo un trato equitativo.
•    En 1989, el líder del PKK, Abdullah Öcalan, fue apresado en Kenia por la CIA y entregado al gobierno turco. Fue condenado a la pena de muerte, la cual no fue efectiva por presión internacional. La corte europea cuestionó el juicio, acusando de que hubo irregularidades, violación al derecho internacional y a los derechos humanos. La justicia turca lo condena a prisión perpetua. Un año después, en 1990, y desde su encierro solitario en la isla de Imrali, Öcalan invita a dos grupos de paz a entrar a Turquía desde las montañas del Kandil. Un grupo estaba formado por guerrilleros y guerrilleras, y el otro, por civiles desplazados que viven en el campamento de Maxmur. La respuesta al pedido de diálogo de Öcalan y el PKK, fue encarcelar por 10 años a todo el grupo conformado por guerrilleros.
•    En 1993 el PKK declara unilateralmente un alto al fuego.
•    Entre los años 1993 y 2000, el gobierno armó grupos paramilitares en las ciudades. Se denominaron Hesbollah, como el grupo libanés, pero no. Esta era una versión desdibujada de aquella organización social que actúa en el Líbano. El resultado fue de decenas de civiles muertos y cientos de nuevos jóvenes sumándose al PKK ante la rabia por los actos cometidos por los paramilitares.
•    Entre los años de 1994 y 1995, más de tres mil pueblos kurdos fueron quemados por el ejército turco. Ese desplazamiento masivo tuvo lugar, “casualmente”, con la consolidación del neoliberalismo en Turquía. Algunos de esos pueblos poseen yacimientos mineros; otros mojan sus pies en los ríos Tigris o Eufrates, donde el gobierno turco planea la construcción de 20 represas hidroeléctricas. Todos se asientan sobre tierras fértiles.
•    En esos mismos años, 1994 y 1995, murieron 17 mil civiles a manos de las fuerzas de la represión turca.
•    En 2002, Abdullah Öcalan, elabora una propuesta para ser compartida con el gobierno turco. El PKK ya no luchará por su independencia. No, ahora luchará por un proceso democrático profundo. Öcalan propone una confederación democrática que incluya al pueblo kurdo, al turco, a los 36 pueblos que viven dentro del territorio de Turquía, y también al resto de los pueblos de Medio Oriente.
•    A fines de marzo de 2006, 14 guerrilleros fueron asesinados en la ciudad kurda de Amed (conocida en turco como Diyarbakır). El pueblo salió a las calles a protestar tirándole piedras a los camiones hidrantes y tanquetas blindadas de la policía. La policía turca salió a las calles a reprimir con gases lacrimógenos y balas de goma y de plomo. Hubo tres civiles muertos. El pueblo no se salió de las calles. La policía fue auxiliada por el ejército. Hubo ocho muertos más; civiles, claro. Entre tanto, al primer ministro Recep Tayyip Erdoğan no le importó si se trataba de mujeres o niños, porque estaban haciendo “acciones terroristas”. Entre los «terroristas» muertos hay un niño de ocho años, otro de nueve y otro de tres.
•    En 2007, el ejército turco, a pesar de otro alto al fuego unilateral declarado por el PKK, comienza a realizar operaciones sobre las montañas del Kandil, con la complicidad de los gobiernos de Irán e Irak, quienes le ceden el permiso para sobrevolar su espacio aéreo.
•    En marzo de este año (2009), el PKK vuelve a hacer otro alto al fuego unilateral, en respeto a las elecciones nacionales en Turquía. El ejército continúa las operaciones sobre el Kandil.
•    El 15 de agosto, al cumplirse 25 años de la primera acción armada del PKK, Abdullah Öcalan, otra vez, desde su encierro solitario en la isla de Imrali, invita a grupos de paz a proponer el diálogo con el gobierno turco. Esta vez lo grupos serían tres: uno de guerrilleras y guerrilleros, otro de civiles del campamento de refugiados de Maxmur, y un tercero de exiliados en Europa. El gobierno y otros partidos reaccionarios, catalogan la entrada de los Grupos de Paz, esperada en la frontera con Irak por 150 mil personas, como un “show”. El gobierno desoye el llamado al diálogo, y le niega el visado a los exiliados, frustrando así, la entrada del tercer grupo.
•    Desde marzo y hasta la fecha, 400 miembros del DTP fueron detenidos y encarcelados.
•    Hay 500 niños entre 8 y 16 años con procesos judiciales. Se habla de penas que podrían ir desde los 15 hasta los 40 años de cárcel. El delito: tirar piedras contra blindados de la policía.

Estas son algunas de las acciones «terroristas» del PKK en estos 31 años.

MUJER, HUELGA GENERAL Y PKK

¿Qué puede haber de similar entre las mujeres, una huelga general y una organización guerrillera?

Según las imágenes difundidas por el mundo occidental sobre las mujeres de Mesopotamia y Medio Oriente, ellas solo saben ser sumisas, deberles reverencias a los hombres y bailar eróticamente para ellos como odaliscas, mientras ellos se regocijan en suntuosos harenes. Nada más alejado de la lucha de las mujeres. Nada más oprobioso que reforzar el machismo y el patriarcado con noticias diluidas en falacias.

Los medios occidentales no hablan de la incesante lucha de las mujeres para establecer una equidad social con los hombres. A las imágenes mentirosas de odaliscas y harenes, las mujeres bailan colectivamente entre ellas, y con los hombres, danzas que recuperan la alegría ancestral. A la sumisión y la reverencia, las mujeres kurdas, le respondieron a esa cultura machista, enfrentándose a sus propios camaradas de armas, ganando así puestos de mando en la lucha guerrillera. Dentro del PKK, las mujeres son autónomas, teniendo, incluso, un ejército propio.

Cada día, la organización de las mujeres crece fogueada por el PKK desde las montañas, y por el DTP, desde las ciudades y pueblos. Pero eso, no solo en territorio kurdo, también en ciudades importantes de Turquía como Estambul y Ankara.

Esa fuerte presencia se vio reflejada el jueves 26 de noviembre, día en que los sindicatos de empleados y empleadas del estado, hicieran una huelga general en Turquía exigiendo aumento de salarios, olvidándose que, ese mismo día, se conmemoraba el día mundial de la lucha contra la violencia a las mujeres. Fiel a su estilo, los sindicatos “olvidaron” que entre sus trabajadores y afiliados hay mujeres. Pero las mujeres no olvidaron que son mujeres, y salieron tanto a hacer la huelga, como a reivindicarse como mujeres, exigiendo los derechos que les corresponden.

Aquel jueves 26, además de aquello, fue la antesala para los festejos por los 31 años del nacimiento del PKK.

Desde el 26 y hasta el 30 de noviembre, se desarrollaron conciertos y marchas en ciudades kurdas como Êlîh (Batman, en turco), Amed (Diyarbakır, en turco), Dêrîk (Derik, en turco), y ciudades de Italia, Inglaterra, Alemania y Suecia, celebrando otro aniversario del PKK.

Más de 200 artistas (muchos de ellos y de ellas exiliados) subieron a los escenarios para cantar y bailar y decir que son kurdas y kurdos, y que no solo están para celebrar un aniversario, sino también para adherir a la propuesta de una salida pacífica al conflicto, que viene intentando el PKK desde hace una década, y es desoída por el ejército turco.

Por Alejandro Haddad

Agencia Rodolfo Walsh

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