¡Cuidado, torturador suelto!: Londres 38 activó alertas para denunciar a exagentes de la DINA que se encuentran prófugos de la Justicia

La Corte Suprema condenó a los ex agentes de la DINA, Guillermo Salinas Torres, Pablo Belmar Labbé y René Quilhot Palma, por el homicidio del ciudadano español y funcionario de la Cepal, Carmelo Soria Espinoza, registrado en 1976.

El sitio de memoria Londres 38 activó alertas para denunciar a los exagentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), condenados por crímenes cometidos durante la dictadura de Augusto Pinochet, quienes se encuentran prófugos de la Justicia.

Londres 38 se refirió en concreto a los casos de los exagentes Guillermo Salinas Torres, Pablo Belmar Labbé y René Quilhot Palma, todos integrantes de la Agrupación de Seguridad Adelantada Indirecta de Pinochet.

Foto: Jorge Renato Francisco León Zenteno,

Homicidio por envenenamiento a exconservador de Santiago

En enero pasado, la ministra en visita extraordinaria Paola Plaza, de la Corte de Apelaciones de Santiago, procesó a los tres exfuncionarios por el crimen del ex conservador de Bienes Raíces de Santiago, Jorge Renato Francisco León Zenteno, ejecutado el 30 de noviembre de 1976, en su departamento ubicado en la comuna de Providencia, mediante la inhalación de gas sarín.

La magistrada encausó a Salinas Torres, Belmar Labbé y Quilhot Palma, como autores del homicidio calificado, por envenenamiento y premeditación conocida, de la víctima.

La actuación criminal de los procesados habría sido ejecutada en apoyo a un operativo de la Agrupación Quetropillán de la DINA, que estaba a cargo del Capitán de Ejército Guillermo Salinas Torres.

De acuerdo a la investigación, Jorge León Zenteno tenía 69 años al momento de los hechos y, según expresa en el certificado de defunción, la causa de su muerte fue “Toxemia aguda inespecífica”.

La familia de la víctima sospechó que en su muerte habían intervenido terceras personas, y especialmente agentes del Estado, ya que León Zenteno se habría opuesto a traspasar ilegalmente inmuebles a la DINA , los cuales estaban emplazados en Santiago y habían sido despojados a opositores del régimen militar.

Pese a que hubo un proceso penal instruido en la época para esclarecer los hechos, nunca alguien fue responsabilizado ni sancionado por su participación.

Sin embargo, en su dictamen, la magistrada Paola Plaza señaló que “entre las últimas horas del 29 y la madrugada del 30 de noviembre de 1976”, los cuatro imputados-quienes se encontraban bajo las órdenes del fallecido ex director de la DINA, Manuel Contreras- fueron al domicilio del conservador de Bienes Raíces de Santiago, en la comuna de Providencia.

Y cuando el abogado abrió la puerta fue “conducido por la fuerza hasta su dormitorio, dejando su cuerpo extendido sobre la cama, maniatado e inmovilizado”.

En eso, los agentes le avisan a los demás integrantes de la Agrupación, quienes “facilitan las maniobras para que la víctima inhale por medio de spray el gas sarín, contra su voluntad, causando su muerte en breve tiempo, producto de toxemia aguda”.

El sarín es un gas mortal cuyos efectos pueden ser confundidos con los provocados por un ataque cardíaco. Fue desarrollado por el químico chileno Eugenio Berríos integrante de la “Brigada Quetropillán” de la DINA, quien se encargó de crear armas químicas, para emplearlas “en la eliminación de los opositores“ a la dictadura.

El sarín fue procesado en un laboratorio instalado en el domicilio del agente norteamericano, Michael Townley, en la comuna de Vitacura,

La prensa de la época lanzó varias teorías sobre la extraña muerte del conservador, aunque un reportaje publicado por el diario La Segunda en 1993 consignó que Townley había confesado su participación en el hecho en 1978.

Foto: Carmelo Soria Espinoza.

Homicidio del funcionario de la Cepal Carmelo Soria

Cabe destacar que el pasado mes de agosto. la Corte Suprema dictó sentencia definitiva en la investigación por el homicidio calificado del ciudadano español y funcionario de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) Carmelo Soria Espinoza, quien fue secuestrado, torturado y luego asesinado por agentes de la dictadura en julio de 1976 en la Región Metropolitana.

En el fallo, la Segunda Sala del máximo tribunal –integrada por los ministros y ministras Manuel Antonio Valderrama, Leopoldo Llanos, María Teresa Letelier, Jorge Zepeda y Eliana Quezada– condenó al exagente de la DINA, Guillermo Salinas Torres a 15 años y un día y 541 días de presidio, en calidad de autor de los delitos de homicidio y asociación ilícita.

En el caso de los exagentes René Quilhot Palma y Pablo Belmar Labbé, la Corte Suprema determinó que deberán cumplir sendas penas de 10 años y un día y 541 días de presidio, como autores del homicidio y asociación ilícita.

Los tres se encuentran prófugos de la Justicia.

Londres 38 contra la impunidad

Londres 38 es una espacio de memorias ubicado entre las calles Londres y Paris en pleno centro de Santiago, en una casona que funcionó como centro de tortura y exterminio de la DINA durante los primeros años de la dictadura. También fue conocida como “Cuartel Yucatán” y fue recuperada por las víctimas, sus familiares y activistas de derechos humanos ( DD.HH.) en 2007.

La organización busca visibilizar la impunidad presente sobre los crímenes de la dictadura, así como las redes que aún protegen a los agentes, empresas y civiles que colaboraron en los secuestros, torturas, asesinatos y violaciones a los DD.HH. que hoy siguen impunes.

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