La muerte de Camilo Cienfuegos, misterio de la revolución cubana

Este 6 de febrero 2013, Camilo Cienfuegos tendría 81 años

Por Wari

06/02/2013

0 0


Este 6 de febrero 2013, Camilo Cienfuegos tendría 81 años. Pero este personaje emblemático de la revolución cubana desapareció el 28 de octubre 1959, es decir menos de un año después de la caída de Fulgencio Batista. Más de 50 años después, las circunstancias de su desaparición quedan oscuras, y la teoría oficial está contestada por diversas versiones.

EL NACIMIENTO DE UNA CONCIENCIA POLÍTICA

Camilo Cienfuegos nació en 1932, en La Habana. Sus padres fueron inmigrantes anarquistas españoles, lo que puede explicar la conciencia política del joven Cienfuegos que se concretizó en su oposición al Golpe de Estado en 1952. Pero es su experiencia fuera del país que va a reforzar su compromiso político.

En 1953 empezó su primer viaje en Estados Unidos, motivado por razones económicas. Durante dos años, Cienfuegos trabajó como obrero en EE.UU., y en el mismo tiempo empezó a establecer vínculos con otros emigrados, especialmente disidentes políticos cubanos, alrededor del diario La Voz de Cuba. Esta experiencia se terminó por su deportación por el Departamento de Inmigración a México, y su regreso en Cuba.

Pero Cienfuegos no va a quedar en la isla más de un año: sus compromisos políticos chocaron con la represión. Recibió una bala en una manifestación, y fue fichado por el Buró de Represión de Actividades Comunistas (lo que no significa que fue comunista, sino que para la policía de Batista, todos los revolucionarios lo fueron), lo que marcó el comienzo de estigmatizaciones, que empujaron a Cienfuegos a exiliarse de nuevo.

En EE.UU., Cienfuegos conoció la existencia de un grupo de oponentes cubanos en México. En septiembre 1956, encontró el grupo organizado por Fidel Castro para iniciar la guerrilla en Cuba. A pesar de su experiencia militar muy limitada, Cienfuegos logró embarcar en el Granma, y así a devenir el ultimo miembro de una tripulación que cambió la historia de Cuba.

EL SEÑOR DE LA VANGUARDIA

En la guerrilla, Camilo se volvió en una figura importante del Movimiento 26 de Julio, combinando cualidades militares y humanas que provocaron su gran popularidad en las tropas. Carismático y bromista, él participó en los combates en la Sierra Maestra, y obtuvo el rango de capitán. Cuando se formó la cuarta columna, dirigida por Ernesto Guevara, Cienfuegos fue encargado de dirigir la vanguardia: así apareció su sobrenombre de “señor de la vanguardia”.

Fue uno de los primeros miembros del Movimiento en combatir fuera de la Sierra Maestra y uno de los “barbudos” más populares en el pueblo cubano. Cuando triunfó la Revolución, el 1 de enero de 1959, el grado de comandante permitió a Cienfuegos mantenerse en el alto mando del Ejercito: participó en la lucha contra las tentativas contra-revolucionarias y también en la reforma agraria.

Pero Cienfuegos solo vio la revolución por la cual había combatido durante 10 meses: el 28 de octubre de 1959, despareció en circunstancias que nunca fueron establecidas de manera clara.

UNA INCOHERENTE VERSIÓN OFICIAL

Según las autoridades cubanas, Cienfuegos despareció con su avioneta, un Cessna 310, entre las ciudades de Camagüey y La Habana, con el soldado Félix Rodríguez y el piloto Luciano Fariñas Rodríguez.

Un comunicado oficial menciona un mal tiempo en la región para explicar la desaparición, lo que fue una mentira, como lo confirmaron distintas investigaciones meteorólogas que muestran que no había ese día condiciones climáticas susceptibles de producir problemas para la aviación.

Para apoyar la versión oficial, miembros del gobierno cubano evocaron en otras circunstancias la posibilidad de una error humano, que parece poco probable, dado que el piloto tenía una alta experiencia de este tipo de avión, con más de 2000 horas de vuelo. También partidarios de la tesis oficial insistieron sobre el carácter temerario de Cienfuegos que podría explicar comportamientos peligrosos y así su desaparición.

¿ELIMINACIÓN DE UN RIVAL?

Frente a la debilidad de la tesis oficial, otras explicaciones aparecieron. Algunas teorías mencionaron la implicación de la CIA, lo que no es extravagante dado todos los intentos de asesinatos de líderes revolucionarios por los servicios estadounidenses. Pero la CIA no tiene el monopolio de las manipulaciones y eliminaciones de oponentes.

En efecto, es probable es que Camilo Cienfuegos fue víctima de otros líderes de la Revolución y particularmente de Fidel Castro. Distintas razones permiten entender porqué Cienfuegos fue eliminado por miembros del gobierno revolucionario.

Primero, Cienfuegos, como su amigo Huber Matos, no tenía las mismas posiciones políticas que los hermanos Castro. Los dos criticaron la fuerte represión que siguió la llegada al poder, y especialmente el uso masivo de la pena de muerte, para los antiguos miembros del ejército como para otros oponentes políticos. También expresaron reservas sobre el manejo de la reforma agraria y sobre la creciente presencia de los comunistas. Esta oposición a la conducta autoritaria de la revolución -que algunos califican de tendencia libertaria-, fue un peligro para las autoridades cubanas.

Segundo, hay que señalar que la popularidad de Camilo, tanto en el ejercito que en el pueblo, fue percibida como una amenaza política, porque fue susceptible de competir por la fidelidad al régimen. Además, algunos evocaron también una dimensión más personal, es decir, el carácter celoso de Fidel frente a Cienfuegos. Esta rivalidad personal fue reforzada por la ambigüedad que existía sobre la dirección del ejército: los dos tenían un alto grado y una legitimidad fuerte para dirigir las tropas.

Finalmente, hay que evocar un episodio poco claro de la vida personal de Fidel que podría también explicar el carácter difícil de las relaciones entre los dos hombres. En febrero de 1959, Fidel tuvo una relación breve con una estadounidense, que fue encontrada en octubre del mismo año en un hotel, drogada y abortada por un medico próximo del “líder máximo”. Testigos dicen que Camilo habría ayudado a la joven mujer a volver en Estados Unidos, lo que habría provocado el descontento de Fidel.

UN CONTEXTO TENSO

La desaparición de Cienfuegos ocurrió en un contexto difícil para él. En efecto, fue a Camagüey porque tenía que arrestar su amigo Huber Matos, jefe militar de la provincia. Matos fue acusado de complot después de su dimisión. En realidad, ese juicio estalinista tenía por objetivo apartar a un líder de la revolución que denunciaba públicamente el control de los comunistas sobre el Gobierno.

Mandar a Cienfuegos para arrestar su amigo fue un hábil cálculo político. En efecto, en caso de desobediencia, fue un pretexto para denunciar a Cienfuegos como miembro del complot, y, en caso de obediencia, fue también una oportunidad para Castro: en efecto, él esperaba una confrontación armada entre Cienfuegos y las tropas fieles a Matos, lo que no ocurrió.

Al final, Matos rechazó la proposición de Cienfuegos de escaparse, sospechando una trampa, y fue condenado a 20 años de cárcel. Cuando desapareció, Cienfuegos estaba volviendo a La Habana, después de una investigación en Camagüey sobre el supuesto complot. Así, el “accidente” permitió hacer desaparecer a un rival político y un testigo de los métodos usadas contra Matos.

DOS VERSIONES, CERO TESTIGOS

Dos versiones explican cómo desapareció el avión de Cienfuegos, pero las dos mencionan la intervención de la Fuerza Aérea Revolucionaria Cubana y el ametrallamiento del avión.

La primera versión es la más simple: menciona el despegue de un caza Sea Fury, supuestamente tripulado por el piloto de Fidel Castro, diez minutos después de la salida de Cienfuegos de Camagüey. Se supone que el Cessna de Cienfuegos fue abatido por el cañón de 20 mm del Sea Fury, que regresó 45 minutos después a la base.

La segunda versión es más sutil. Evoca una alarma en la principal base aérea, que señaló un avión, originario de Miami, incendiando campos de caña de azúcar. En el mismo tiempo, se supone que el piloto de Cienfuegos recibió una llamada sobre un avión perdido encima del mar que necesitaba ayuda, lo que provocó el cambio de trayectoria del aparato. Así Cienfuegos habría sido asesinado por un miembro de la Fuerzas Aérea convencido de atacar a un saboteador. Esta versión sugiere un plan bien ordenado, con participación de responsables militares de alto grado.

No hay elementos materiales que permitan preferir una de las dos versiones, pero existen testimonios de cubanos que vieron una explosión en el cielo a una hora que concuerda con la desaparición del avión.

Las dificultades para encontrar elementos que permiten reconstituir lo que pasó parecen venir de la eliminación sistemática de las pruebas y testigos. En efecto, más de veinte personas vinculadas con el caso murieron en circunstancias violentas. Los testigos de la explosión desaparecieron, el oficial del aeropuerto se disparó una bala en la cabeza, su registro desapareció, el capitán Naranjo, a cargo de la investigación, fue asesinado, su asesino también. El papel de Osvaldo Sánchez, agente del KGB en Cuba, fue evocado en esta serie de desapariciones.

En todo caso, los asesinos de Camilo Cienfuegos actuaron con un incontestable profesionalismo: hasta hoy día, nadie ha encontrado pruebas que permitan acusar a alguien con certeza. Quedan las convicciones. Las de su amigo Matos son claras: “No sé como, pero sí estoy convencido de que lo mataron”.

Por Pierre Pierre Le Regent

El Ciudadano

Documental sobre la muerte de Camilo Cienfuegos

Artículos relacionados:

Carlos Franqui, figura fundacional de la revolución cubana: “La ideología de Fidel es el Poder”

Jacques Lagas: el olvidado héroe chileno de la revolución cubana

Síguenos y suscríbete a nuestras publicaciones