Seis activistas iniciaron la protesta

Activistas sociales y campesinos inician huelga de hambre en apoyo a Lula

También denuncian la situación de miseria que se está agravando en Brasil, así como el incremento de la violencia y el desempleo, como consecuencia de las políticas ejecutadas por el gobierno de Michel Temer

Por Chevige González Marcó

31/07/2018

Publicado en

Brasil / Latinoamérica

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Activistas de movimientos sociales en huelga de hambre

Miembros de organizaciones sociales y campesinas iniciaron este martes una huelga de hambre en solidaridad con el expresidente Lula Da Silva (2003-2011), quien se encuentra encarcelado mediante un proceso carente de pruebas. Seis miembros de los movimientos populares iniciaron la protesta frente a la sede del Poder Judicial.

Según explicó Jaime Amorim, miembro de la dirección nacional del Movimiento de los Sin Tierra (MST), la huelga tiene dos objetivos: «El primer objetivo es denunciar la situación de miseria que se está agravando cada día en nuestro país, debatiendo con la sociedad sobre la hambruna, la violencia, el desempleo y las consecuencias del golpe (de Estado). El segundo objetivo es discutir la democracia, debatiendo los Poderes Judiciales y la libertad de Lula», afirmó.

Amorim explicó que la huelga de hambre solamente finalizará «el día en que Lula sea soltado y pueda disputar las elecciones». Por su parte, Frei Sergio, miembro del Movimiento de Pequeños Agricultores (MPA), manifestó que el fin de la huelga lo determinarán los jueces de la Corte Suprema.

«Nosotros podemos pasar hambre por un gesto consciente de lucha, pero si continuamos con este modelo de país, la hambruna será una imposición para varios brasileños y brasileñas. Para el pueblo, el símbolo de la esperanza para cambiar esta situación es Lula«, comentó.

Otras acciones de protesta

La huelga de hambre forma parte de otras medidas para pedir la libertad de Lula, como el Día de la Paralización Nacional, anunciado para el 10 de agosto, y la «Marcha Nacional Lula Libre», que debe producirse entre el 10 y el 15 de agosto, desde varios puntos del país hasta llegar a la capital, Brasilia.

El expresidente Da Silva lidera todos los sondeos de voto de cara a los comicios, aunque sólo podrá presentarse si recibe un indulto por parte de la Justicia brasileña que, por el momento, ha rechazado todos los pedidos de libertad presentados por la defensa.

Según la ley brasileña, una persona condenada en segunda instancia, como es el caso de Lula, no puede presentarse a un cargo público electo. Tanto Lula como el PT reiteran que podrá presentarse a las elecciones. Según el calendario electoral brasileño, el 15 de agosto es la fecha límite para la inscripción de las candidaturas en el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Los huelguistas fueron expulsados de las inmediaciones del Supremo Tribunal Federal de Justicia, por los cuerpos de seguridad, luego que hicieran lectura de un manifiesto en el que expresaron sus reclamos a los magistrados.

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