El gobierno de Venezuela calificó como «la cortina de humo más ridícula que hemos visto» el aumento de la recompensa anunciada por Estados Unidos (EE.UU.) contra el presidente de la nación caribeña, Nicolás Maduro, en medio de un nuevo capítulo de tensiones bilaterales marcado por acusaciones sin pruebas y una retórica escalada por parte de la Casa Blanca.
El canciller venezolano, Yván Gil, respondió de manera contundente al aumento de ‘recompensa’ a 50 millones de dólares, anunciado este jueves por la fiscal general de EE.UU., Pamela Bondi, en contra de Maduro, quien la Casa Blanca, acusa desde hace años –sin prueba alguna– de participar en actividades ligadas con el narcotráfico.
En un video difundido en su cuenta de X, Bondi anunció que los Departamentos de Estado y Justicia ofrecen ahora 50 millones de dólares por información que lleve a la captura de Maduro, acusándolo de utilizar «organizaciones terroristas extranjeras como el Tren de Aragua (TDA) –ya desmantelado en Venezuela– y los cárteles de Sinaloa y de los Soles para introducir drogas letales y violencia en EE.UU.»
La fiscal aseguró que incautaciones certificadas por la DEA estarían vinculadas a Maduro y representarían «una fuente fundamental de ingresos para cárteles con sede en Venezuela y México». Además, sostuvo que «la cocaína suele estar mezclada con fentanilo, lo que ha provocado la pérdida y destrucción de innumerables vidas estadounidenses».
«Bajo el liderazgo del presidente Trump, Maduro no escapará de la justicia y deberá rendir cuentas por sus atroces crímenes», amenazó Bondi, calificando al mandatario venezolano como «uno de los mayores narcotraficantes del mundo» y «una amenaza para la seguridad nacional de EE.UU.»
¿Pruebas contra Maduro?
Las acusaciones de Washington contrastan con los datos de organismos internacionales. El último informe de la Oficina de Drogas y Crimen de la ONU señala a Venezuela como un país de tránsito de cocaína producida en Colombia, Perú y Bolivia, pero no como un centro de producción o distribución a gran escala. Tampoco hay evidencia sólida de la existencia de grandes cárteles operando en suelo venezolano, y las autoridades locales han reportado periódicamente incautaciones de drogas provenientes de Colombia.
Además, no existen reportes confirmados de fentanilo en Venezuela, una sustancia que ha causado una crisis de sobredosis en EE.UU., pero cuya producción se concentra principalmente en Asia y México.

«La cortina de humo más ridícula que hemos visto»
«La patética «recompensa» de Pamela Bondi es la cortina de humo más ridícula que hemos visto. Mientras nosotros desmontamos las tramas terroristas que se orquestan desde Estados Unidos, esta señora sale con un circo mediático para complacer a la ultraderecha derrotada de Venezuela», indicó en un mensaje a compartido a través de su cuenta de Telegram.
El canciller venezolano cuestionó la credibilidad de Bondi y recordó su historial de controversias públicas. “No nos sorprende, viniendo de quien viene. La misma que prometió una inexistente lista secreta de Epstein y que se revuelca en escándalos de favores políticos”.
El titular para las Relaciones Exteriores calificó como una “burda operación de propaganda política” esta nueva agresión contra Venezuela. Señaló que “su show es un chiste, una desesperada distracción de sus propias miserias”.
Gil aseguró que este tipo de acciones no afectan la determinación del gobierno venezolano para desmontar las estructuras conspirativas que operan desde el extranjero. «La dignidad de nuestra patria no está en venta», afirmó.
Asimismo, ratificó el compromiso de la administración con la defensa de la soberanía, la verdad y la protección de la patria venezolana frente a cualquier intento de injerencia.
«Repudiamos esta burda operación de propaganda política», cerró, según consignó VTV.