LA RABIA
Aquel nefasto gobierno había terminado sin gloria ni pena hace ya varios años. Pese a algunos intentos por sancionar a Piñera, al jefe de los pacos y a otros, incluso ante organismos internacionales, nada había pasado. Los tribunales, independiente de qué tribunal se trate, saben que tienen que atacar a los más vulnerables, y lamentablemente Piñera nunca llegó a ser uno vulnerable.