#EstePolvoTeMata: Sigue la impunidad del grupo Luksic en Antofagasta

No sabemos si la justicia es débil o prima el mecenazgo político, pero lo que sí sabemos es que el grupo Luksic goza de inmunidad en la Región de Antofagasta. Esto, porque el conglomerado ha salido limpio de polvo y paja de todas las denuncias y multas que le han cursado a Antofagasta Terminal Internacional (ATI), de su propiedad. Hoy la Justicia paralizó la demolición de un galpón, de propiedad del dueño de la CCU, que es cuestionado como foco de contaminación de arsénico y plomo en la ciudad.

Recordemos que las organizaciones ciudadanas, como #EstePolvoTeMata, vienen denunciando hasta el cansancio la presencia de metales pesados en varios sectores de la zona, contaminación que relacionan con los galpones de acopio que la empresa del dueño del Banco de Chile mantiene en ATI. Además, la compañía, acumula sanciones por incumplimiento de normas ambientales y está siendo investigada como fuente de contaminación de metales pesados en la zona, después de que a más de 200 niños se le detectó altos niveles de plomo y arsénico en la sangre.

No obstante, hoy una gota rebasó el vaso. A mediados de marzo, el municipio antofagastino dio orden de demolición del uno de los galpones del ATI, ya que según argumentaban el galpón está ubicado en terrenos urbanos y además la empresa tiene causas pendientes por contaminación en la zona. Sin embargo, hoy se dio a conocer que el Primer Juzgado Civil de Antofagasta acaba de paralizar el decreto edilicio, es decir la demolición, con una orden de no innovar.

El tema es preocupante porque, según la alcaldesa, Karen Rojo, Luksic no puede usar tal zona en operaciones portuarias pues no le corresponde. El lugar es de uso público, explica la autoridad.

Hay que destacar que antes de la orden de demolición, la Superintendencia de Medio Ambiente, decretó el cierre, por un mes, de dos galpones de la empresa. Sin embargo, Luksic pudo sortear el cierre de uno de ellos porque planteó corregir tales incumplimientos ambientales. Sigue la impunidad…

El Ciudadano