Medio Ambiente

Fujisawa SST, la ciudad más sostenible del planeta

El gigante japonés Panasonic ha desarrollado toda su tecnología para crear la ciudad más sostenible del mundo. Se trata de un proyecto novedoso y que aún está en fase de construcción, pero que espera servir de ejemplo para las generaciones futuras.

Por Marta Ubeda

01/12/2014

Publicado en

Medio Ambiente / Mundo

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Ciudad sostenible

A 50 kilómetros de Tokio se está creando Fujisawa SST, una ciudad que pretende ser las más resptuosa del mundo con el medio ambiente a través de la reducción del consumo y las emisiones de cada uno de los hogares que la forman. Panasonic fue el encargado de liderar este proyecto en un territorio de unas 19 hectáreas en el que el gigante japonés pone a prueba a gran escala todo su equipamiento de gestión de energía para reducir el gasto energético hasta un 70% en los hogares y un 20% en las zonas comunes.

De las 1.000 casas que quieren construir para el año 2018, ya están terminadas las viviendas de la primera fase, lo que ha permitido el traslado de los primeros habitantes a esta ciudad que pretende convertirse en referente mundial por ser sostenible durante 100 años.

El sistema de transporte de Fujisawa se basa en coches eléctricos y compartidos. De esta forma, las personas que viven en las viviendas unifamiliares sostenibles no serán propietarias de ningún vehículo, y las casas estarás, por lo tanto, desprovistas de garaje. Cuando alguno de los habitantes necesite un coche, tendrá que buscar uno compartido o alquilarlo. Los aparcamientos están ubicados cada 10 o 20 viviendas y debidamete equipados para la recarga de los vehículos eléctricos. El medio de transporte más recomendado para moverse por Fujisawa SST es, según sus creadores, la bicicleta. Ahorro y salud en el mismo pedaleo.

La energía que esta ciudad avanzada requiere se basa, principalmente, en la obtención de energía solar a través de la instalación de placas solares en cada vivienda y zona común. Pero Fujisawa también produce electricidad y agua caliente a través de una células de combustible de gas natural y aire. La energía resultante se almacena en baterías eléctricas y sistemas de bombas de calor que reutilizan el calor disperso para reducir el consumo de cada hogar.

Continuando con la reducción de consumo y emisiones, los sistemas de iluminación de las casas y las zonas comunes, están dotados de sensores que detectan la luz del exterior para adaptar la interior en función de la demanda. El aire acondicionado utiliza un sistema parecido recurriendo a sensores para detectar la presencia y actividad de personas y regular su funcionamiento.

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