"Si te sientes mal, sólo tienes que ver a tus gatos para sentirte mejor, porque ellos saben que las cosas son como son” - Bukowski

Julio Cortázar y otros escritores amantes de los gatos

Las letras y los gatos han ido acompañados desde hace mucho tiempo. Junto a Cortázar, hay varios escritores fanáticos de los gatos.

Por Pablo Prieto

26/08/2021

Publicado en

Artes / Literatura / México

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La escritura puede ser una actividad completamente solitaria. La soledad permite hacer un proceso de introspección y elegir las palabras adecuadas para expresar aquello que vamos viviendo o experimentando en lo real o imaginario. No obstante, los escritores nunca estuvieron solos. Muchas veces hicieron presentes en sus vidas a los gatos, animales que que tuvieron funciones más allá de eso.

El gato como compañero literario derivó eventualmente en inspiración de algunos escritores. En este misticismo propio de su naturaleza, los gatos los encaminaron a ver a la vida-muerte desde una visión completamente nueva.

A continuación algunos escritores que no resistieron el encanto felino.

Julio Cortázar

El argentino que nos presentó un mundo lleno de jazz en Rayuela o que nos hizo ver nuestras diferencias socio-económicas en el cuento “La autopista al sur”, también fue un aficionado a estos mamíferos. Cortázar tenía un gato llamado Teodoro W. Adorno, que un día apareció en su vida. Era de pelaje negro; lo encontró en la calle. Siempre lo cuidaba al volver a casa. No obstante, un día al regreso, el gato cínicamente ignoró al escritor argentino, ante esto el autor no hizo más que continuar, ¡así es la vida felina!

Carlos Monsiváis

Carlos Monsiváis fue un escritor mexicano con una profunda adoración a los gatos. En 2008, Claudia Vázquez Lozano se acercó al escritor, por medio de un e-mail, para pedirle apoyo en la iniciación de una fundación con el fin de protegerlos. Fue así como nació la asociación civil “Gatos Olvidados”.

Monsiváis tuvo una gatita llamada “Miss Oginia” a la cual salvo de la eutanasia y le era totalmente fiel. Durante su enfermedad Monsiváis se hacía acompañar de esta. Por otro lado, se encuentra “Catástrofe” quien llegó a su casa, por medio de la fundación y acompañó junto con sus demás gatos. Si los nombráramos la todos la lista sería interminable.

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Charles Bukowski

“En mi próxima vida, quisiera ser un gato”, escribió Charles Bukowski en su poema “Mis gatos”. El escritor alemán que pasó la mayor parte de su vida en California, tenía un apreció por los felinos que le llevó a ponerlo por escrito en su obra y a tener junto con su esposa 9 de ellos.  “Tener un montón de gatos es bueno. Si te sientes mal, sólo tienes que ver a tus gatos para sentirte mejor, porque ellos saben que las cosas son como son” señala Bukowski en una entrevista realizada a Sean Penn en 1987.

Jorge Luis Borges

“Siempre preferí el enigma que suponen los gatos” menciona Borges, quien tuvo por gato a Beppo. Beppo en realidad se llamaba Peppo, nombre de un jugador de la época, sin embargo Borges consideró el rebautizar a su gato, debido al gato de Lord Byron, importante poeta inglés.

A este famoso felino le dedico “A un gato”:

No son más silenciosos los espejos
ni más furtiva el alba aventurera;
eres, bajo la luna, esa pantera
que nos es dado divisar de lejos.
Por obra indescifrable de un decreto
divino, te buscamos vanamente;
más remoto que el Ganges y el poniente,
tuya es la soledad, tuyo el secreto.
Tu lomo condesciende a la morosa
caricia de mi mano. Has admitido,
desde esa eternidad que ya es olvido,
el amor de la mano recelosa.
En otro tiempo estás. Eres el dueño
de un ámbito cerrado como un sueño.

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Haruki Murakami

Para los seguidores de Murakami seguro no es novedad la fascinación del escritor japonés hacia los felinos, sobre todo por la cultura de la cual proviene y que se ve presente en sus obras. En su texto “El pueblo de los gatos”, Murakami nos dibuja una escena surrealista donde los gatos tienen el control de un pueblo, al cual un joven decide visitar y una vez pasada la impresión decide permanecer, aunque uno nunca sabe cuándo los gatos se liarán algo.

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