Mineápolis y Nueva York prohibirán a la Policía aplicar estrangulamientos durante las detenciones

La Alcaldía de Mineápolis aprobó el viernes una orden que, entre otras cosas, prohíbe a la Policía de la ciudad hacer uso de la técnica de los estrangulamientos durante las detenciones, mientras que Nueva York ha anunciado que hará lo propio en su estado, después del asesinato del ciudadano afroamericano George Floyd a manos del agente Derek Chauvin.

La autopsia oficial reveló que Chauvin mantuvo la rodilla en la parte posterior del cuello de George Floyd al arrestarlo durante ocho minutos y le causó la muerte como consecuencia de «la sumisión, la restricción y la compresión del cuello«.

Casi dos tercios de las personas a las que la Policía de Minéapolis ha inmovilizado por el cuello desde 2012, un total de 428, eran afroamericanos, según un estudio publicado por eCNN elaborado con datos del propio Departamento de Policía de la ciudad.

Esta cifra significa que el procedimiento en cuestión, que está restringido o prohibido en muchos departamentos de Policía en Estados Unidos, se ha usado una media de casi una vez a la semana en Mineápolis desde ese período. Además, el 14% de estas 428 personas, un total de 58, perdieron la consciencia después de que los agentes les inmovilizaran por el cuello.

Asimismo, la orden exige a la Policía de Mineápolis, ubicada en el estado de Minesota, que informe e intervenga si un agente utiliza esta técnica.

Al mismo tiempo, la orden, a la que tuvo acceso la cadena de televisión CNN, exige que el jefe de la Policía de Mineápolis autorice el uso de armas de control de multitudes, como balas de goma y gases lacrimógenos, reseñó Europa Press.

Por último, el texto aprobado, que es temporal y necesitará la ratificación de un juez para entrar en vigor, ordena también que se impongan las medidas disciplinarias oportunas y permite auditorías civiles de las imágenes procedentes de las cámaras corporales de los agentes.

«Este es un momento en el que podemos cambiar totalmente la manera en la que opera nuestro Departamento de Policía«, indicó el alcalde de Minéapolis, Jacob Frey, quien admitió que en el pasado ha habido dificultades para llevar a cabo cambios de esta naturaleza y ahora, finalmente, puede hacerse «bien».

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