Ante la ausencia de ayuda

Refugiados sirios en El Líbano claman por ayuda al ser azotados por tormenta

Los campamentos carecen de infraestructura adecuada y ante la falta de alcantarillado, las aguas residuales se desbordaron y filtraron las tiendas, lo que aumenta el riesgo de enfermedades, epidemias y muertes

Por Charilin Romero

13/01/2019

Publicado en

Derechos Humanos / Medio Ambiente / Mundo

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Una tormenta de nieve y lluvia amenaza este domingo a más de un millón de sirios que se encuentran refugiados El Líbano y los obliga a tomar precauciones desplazándose a la parte nororiental del Valle de Bekaa, para resguardar sus vidas.

La mayoría de los sirios se encuentran en asentamientos informales, cuya población está vulnerable a los embates de la naturaleza, tras el desbordamientos de ríos que deja inundado todo lo que se consigue a su paso.

Luego de las inundaciones y antes de que la tempestad Norma azotará el país, muchos encontraron asilo en las viviendas incompletas, garajes o escuelas evacuadas, debido a que sus condiciones económicas les impiden pagar las exorbitantes rentas impuestas por los casatenientes.

Refugiados no cuentan con recursos para pagar las rentas impuestas por los casatenientes

En la localidad de Ghazze, existen al menos mil 500 tiendas de campaña divididas en varios campamentos que sufrieron daños considerables por la tormenta Norma, durante la semana pasada. Sin embargo, los metereologos señalan que la tormenta de nieve y lluvia llegó con fuerza a la nación del medio oriente.

Wessal Al Mustafa, madre de cinco hijos, dijo a medios digitales que teme que otra tormenta ponga al borde de la muerte a sus cinco hijos.

«Fue tan repentina la tempestad que apenas me las arreglé para sacar a mis hijos de la tienda y agarrar unas pocas prendas de ropa antes que estuviéramos por completo empapados», señaló Al Mustafa a la cadena qatarí Al Jazeera.

Los campamentos dispuestos para los refugiados sirios carecen de infraestructura adecuada y ante la falta de alcantarillado, las aguas residuales se desbordaron y filtraron las tiendas, lo que aumenta el riesgo de enfermedades, epidemias y muertes.

La tormenta de nieve llegó este domingo a El Líbano

En este momento, unas 70.000 refugiados (más de la mitad menores) y un total de 850 campamentos informales siguen en riesgo, según el Consejo Noruego para los Refugiados.

Desde que comenzó el conflicto en Siria hace siete años, las organizaciones no gubernamentales se responsabilizaron con los refugiados, pero en la actualidad sus esfuerzos no alcanzan por la falta de recursos económicos y las intensas nevadas dejaron medio metro de nieve y numerosos asentamientos permanecieron incomunicados, complicando la llegada de ayuda a las zonas afectadas.

De acuerdo con un informe presentado por la Organización de las Naciones Unidas en 2018, las condiciones de alojamiento empeoraron para los desplazados, cuando los recortes de ayuda ordenados por el presidente norteamericano, Donald Trump, se comenzó a cumplir para desmejorar las condiciones de quienes huyeron de Siria, a causa de la guerra iniciada por Washington.

Más de la mitad de los refugiados son niños

Solidaridad entre sirios

Centros comunitarios, gimnasios, mezquita o escuelas han cedido sus instalaciones para convertirse en albergues temporales para los afectados por la tormenta y ante una respuesta tardía o inexistente por parte de las autoridades libanesas, la población refugiada ha sido la primera en responder a la demanda de auxilio de sus compatriotas.

Mientras que los desplazados que viven en núcleos urbanos en la Bekaa, ha acogido a afectados en sus casas y las ONGs locales (la inmensa mayoría sirias), trabajan a destajo desde hace días para poner a salvo a quienes han visto inundadas sus viviendas.