Afrochilenos: Los orígenes no reconocidos

Una comparsa con tambores de danza afroamericana condujo a organizaciones afrodescendientes al Palacio de La Moneda con el objetivo de entregar una carta con la petición formal de ser reconocidos como grupo étnico en el próximo censo 2012. Este año se configura el borrador de preguntas que testea el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y de él saldrá la versión final para la medición.

La Alianza Afrochilena agrupa a diferentes organizaciones, mayoritariamente de la región de Arica y Parinacota, como: Oro Negro, Arica Negro y Lumbanga. Este organismo, en conjunto de otros proyectos como Incide, se ha propuesto el reconocimiento cultural al grupo afrodescendiente en los registros oficiales chilenos.

Marta Salgado Enríquez, presidenta de la alianza de organizaciones afrochilenas de la XV Región, da cuenta de pertenecer a un grupo étnico no reconocido oficialmente por el Estado chileno. “Nosotros descendemos de los esclavizados que estuvieron en el virreinato de Perú”, declara.

La propuesta de la Alianza es la “incorporación de la variable afrodescendiente al censo 2012”, petición que es respaldada por un estudio sistematizado hecho el año 2009 en la zona de Arica y Parinacota sobre la cantidad de personas que aceptan tener lazos sanguíneos africanos.

Este grupo se pudo mantener semi-homogéneo en la zona del norte de Chile, pero ello no implica la ausencia de descendencia africana en el resto del territorio. “En Chile (entonces Capitanía General) también había esclavos africanos y eso se registra en los censos hasta 1813. Hasta el día de hoy podemos encontrar afrodescendientes en ciudades como Quillota, La Ligua, Colchane, Serena y Coquimbo”, señaló Marta Salgado.

Este año la ONU celebra el 2011 el “Año Internacional de Pueblos Afrodescendientes”, ocasión que sirve para reafirmar la demanda identitaria para este grupo en Chile. «Esta inclusión de afrodescendientes en los censos de población es una tendencia que se está dando en todos los países del continente”, dice Cristián Báez, miembro del grupo Lumbaga.

UNA HISTORIA IGNORADA

Según el historiador Francisco Antonio Encina, el 13% de la compañía de Diego de Almagro que llegó a Chile desde el Virreynato del Perú estaba compuesto por personas negras. Por su parte el historiador conservador Gonzalo Vial aseguró que hacia el año 1558 “el número de negros, mulatos y zambos bordeaba en Chile los 5.000, contra 2.400 españoles, 17.000 mestizos y 48.000 indígenas, o sea, de la población chilena no puramente india, al terminar el siglo XVI, casi un 20% llevaba en la sangre estigma africano”.

Por Gustavo Peralta Vargas

El Ciudadano