Colegio de Arquitectos apoya Inmuebles Recuperados por Autogestión en el centro de Santiago

Valorando la iniciativa levantada por familias sin casa provenientes del Barrio Matadero-Franklin de Santiago centro, el Comité de Hábitat y Vivienda del Colegio de Arquitectos de Chile brindó su apoyo a los pobladores, actualmente amenazados por el Ministerio de Bienes Nacionales para abandonar las tres casas que proyectan soluciones habitacionales sociales para más de 30 […]

Valorando la iniciativa levantada por familias sin casa provenientes del Barrio Matadero-Franklin de Santiago centro, el Comité de Hábitat y Vivienda del Colegio de Arquitectos de Chile brindó su apoyo a los pobladores, actualmente amenazados por el Ministerio de Bienes Nacionales para abandonar las tres casas que proyectan soluciones habitacionales sociales para más de 30 familias.

“Vivimos en ciudades marcadas por una inequidad urbana básica: Ni los gobiernos ni el mercado han sido capaces de proveer viviendas ni entornos adecuados para las personas de bajos ingresos. Más aún, con las políticas cuantitativas de vivienda social y la inexistencia de planificación y de política urbana hemos reproducido y aumentado la inequidad, gracias a la masiva construcción de viviendas de mínimo estándar en nuestras periferias”, indica al inicio la declaración de los arquitectos.

En la vía de pensar la ciudad como un artefacto colectivo en cuya creación los ciudadanos tienen derecho a intervenir activamente, “valoramos y solidarizamos con los procesos de autogestión adelantados por movimientos como el Movimiento de Pobladores en Lucha (MPL) y sus Inmuebles Recuperados por Autogestión (IRA) en la medida que representan nuevas modalidades propositivas para participar en la gestión urbana, para disminuir las inequidades urbanas y para hacer efectivo el derecho de permanecer en la comuna de Santiago”, señalan.

Además expresan su preocupación por el cambio de actitud que han tenido el Ministerio de Bienes Nacionales, el que ha conminado a los ocupantes a abandonar las propiedades, que serían licitadas a empresas inmobiliarias y no vendidas a sus actuales ocupantes para desarrollar un programa de vivienda social.

“Esta actitud no se condice con la práctica habitual de dicho ministerio, que ha cedido innumerable cantidad de inmuebles y propiedades de todas las chilenas y chilenos a intereses particulares e individuales y, sin embargo, pone reparos cuando se trata de un interés colectivo como el de los vecinos que han recuperado con su esfuerzo y su trabajo voluntario inmuebles que estaban en completo abandono y semi-destrucción”, indica el comunicado.

Lea un reportaje sobre la génesis y prácticas de los IRA:

Inmuebles Recuperados por Autogestión: Cuando la ira da paso a la acción

Por Cristóbal Cornejo

El Ciudadano

 

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