Las cuentas de la izquierda tras la bajada de Insulza

Jorge Arrate asegura que renuncia de Insulza “es una buena oportunidad para que el PS reflexione sobre su posición política y apoye a un candidato de la izquierda reconstituida”

Por Mauricio Becerra

05/01/2009

Publicado en

Política / Portada

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Jorge Arrate asegura que renuncia de Insulza “es una buena oportunidad para que el PS reflexione sobre su posición política y apoye a un candidato de la izquierda reconstituida”. Hirsch llama a socialistas a integrarse a una alianza más amplia que el Juntos Podemos y el diputado Aguiló está dispuesto a votar por Arrate aunque éste renuncie a la Concertación. La Juventud Socialista, en tanto, está confundida.

Hoy José Miguel Insulza comunicó oficialmente que no quiere ser candidato presidencial. Después de semanas de incertidumbre, el cuatro veces ministro de gobierno dijo que su presencia en Chile “tiene por objeto solicitar a los partidos de la Concertación que mi nombre no sea considerado en la elección presidencial de 2009”. Además manifestó su decisión de permanecer al frente de la OEA hasta el fin de su mandato.

La salida de Insulza de la carrera presidencial deja al Partido Socialista sin candidato y a Frei como el abanderado más fuerte del conglomerado oficialista. Como si fuera poco, llamó a proclamar al ex Presidente demócrata-cristiano candidato único de la Concertación, sin realizar primarias, lo que molestó sobremanera al otro precandidato oficialista, el radical José Antonio Gómez.

Pero el apoyo de Insulza y la directiva del partido encabezada por Camilo Escalona a la candidatura de Frei, no es consenso dentro del PS. Numerosos son los sectores y los parlamentarios que insisten en que el socialismo tenga un candidato propio que se bata con Frei en primarias. Otros, incluso, apoyarían a Jorge Arrate aunque éste renunciara al partido y todos concuerdan en que cualquiera sea el escenario, Frei perderá el apoyo de muchas bases socialistas.

No pocos analistas coinciden que el efecto Ravinet es un mal presagio para la candidatura de Eduardo Frei. La derrota del ex ministro y barón concertacionista a manos del UDI Pablo Zalaquet, por la alcaldía de Santiago centro, fue la primera señal de rechazo de los electores a un histórico y perteneciente al ADN íntimo del conglomerado de gobierno.

DISIDENCIA EN EL PS

Entrevistado por El Ciudadano, Marco Enríquez-Ominami, aseguró que la renuncia de Insulza era la “crónica de una muerte anunciada” y culpa a la directiva socialista. “La directiva del partido no ha dejado de equivocarse y hacer el loco, la presión a los parlamentarios, el ataque al debate y la democracia interna llegó a su clímax y ahí está el resultado: no tenemos candidato presidencial”, asegura el diputado por la Quinta Región, considerado un díscolo por el sector dominante, la Nueva Izquierda.

Consultado por las expectativas que deposita en la Convención Presidencial Socialista convocada para definir un candidato a mediados de enero, Enríquez-Ominami es pesimista: “es una broma, no hay que tomársela en serio, la directiva la pateó todo el tiempo y ahora la hacen cuando le conviene a ellos, no tengo ninguna expectativa porque la convención es un chiste”. Aún así, asegura que hará “todo lo posible para que hayan primarias y el candidato no sea Eduardo Frei”. Él mismo no se descarta como carta: “no hago política por tener un hobby”.

Por su parte, el diputado socialista, Sergio Aguiló, tampoco se convence con un demócrata-cristiano como candidato: “es muy poco probable que Frei capte el voto de aquellos que con justificada razón quieren ver de una vez por todas cumplidos sus anhelos de justicia social y tienen expectativas del programa que en un comienzo delineó la Concertación”. Aguiló cree que la ausencia de un candidato del PS provocará que un masivo grupo de socialistas a lo largo y ancho de Chile busque una alternativa en la izquierda.

En el eventual escenario de que Arrate sea candidato de la izquierda extraparlamentaria, Aguiló dijo que “sin duda, yo y muchos socialistas lo apoyaríamos, porque es un político de enorme envergadura y uno de los mayores intelectuales de Chile”.

El aludido Jorge Arrate, por su parte, reconoció a El Ciudadano que la renuncia de Insulza “es una buena oportunidad para que el PS reflexione sobre su posición política y apoye a un candidato de la izquierda reconstituida”. El ex ministro de Educación y Trabajo aseguró que con Insulza abajo reforzará su candidatura: “la derecha será derrotada con un candidato de centro y otro de izquierda, y yo quiero que el PS sea parte de la segunda alternativa”.

IZQUIERDA EXTRAPARLAMENTARIA

Tomás Hirsch, una de las cartas presidenciales de la izquierda extraparlamentaria, opinó que “no me cabe duda de que son muchos los socialistas, de base y de la estructura del partido, que estarían dispuestos a apoyarnos en la construcción de una alternativa amplia”, afirmó desde Argentina, subrayando que en el Partido Humanista están abiertos a la incorporación del mundo socialista en una alianza más amplia que el Juntos Podemos.

En la Juventud Socialista, en tanto, las posiciones son tibias. Daniel Melo, su presidente, es partidario de escuchar la petición de Insulza para apoyar a Frei. “Estamos abiertos a esa posibilidad, siempre y cuando se decida a combatir la exclusión y tenga la educación pública como una centralidad de su programa”, dijo Melo.

Sin embargo, fuentes internas de la JS, aseguran que ese consenso es falso y que está determinado por “presiones de la directiva escalonista”, tornándose muy posible que numerosos miembros de la JS quieran apoyar a Arrate o, en un segundo lugar, a Guillermo Teillier.

Francisco Figueroa Cerda

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