Más zapatos para Bush

Decenas de zapatos cuyas etiquetas llevan los nombres de iraquíes muertos en la invasión del país árabe, están siendo colocados frente a la Casa Blanca


Autor: Mauricio Becerra


Decenas de zapatos cuyas etiquetas llevan los nombres de iraquíes muertos en la invasión del país árabe, están siendo colocados frente a la Casa Blanca.

La acción es convocada luego de que el periodista iraquí, Muntazer al-Zaidi, lanzó el domingo pasado sus 2 zapatos al presidente estadounidense, George W. Bush, durante una conferencia de prensa en Bagdad.

En la pancarta adjunta a los zapatos dejados en Washington, se lee ‘‘Por las viudas, huérfanos y asesinados en Irak’’.

En Irak, en tanto, Al-Zaidi fue presentado ante un juez de Bagdad y, según dijo un vocero del Consejo Supremo de Justicia de Irak, el periodista admitió haber cometido “una agresión contra un presidente”.

Muntazar al-Zeidi llamó la atención mundial, tras difundirse las imágenes que lo muestran lanzándole sus zapatos al mandatario estadounidense, en plena rueda de prensa, el domingo, en Irak. “Éste es un beso de despedida del pueblo iraquí, perro”, dijo el periodista al lanzar el primer zapato. ‘Perro’ es uno de los peores insultos en el mundo árabe.

Su hermano, Dargham al-Zeidi, dijo a la BBC, que el periodista habría sufrido una serie de agresiones luego de ser reducido por los guardaespaldas del presidente norteamericano. Señaló que al profesional se le rompieron la mano, algunas costillas, se le ocasionó una herida en el ojo y lesiones internas.

Esto habría ocurrido luego de que Al-Zeidi, fuera trasladado a un hospital militar estadounidense en la capital iraquí. El gobierno iraquí, por su parte, no ha emitido ningún comunicado oficial sobre el estado de salud del periodista, aunque aclaró que sería  procesado judicialmente en el marco de la ley iraquí.

Dargham al-Zeidi también señaló que el periodista no ha tenido acceso a abogados, pese a que después del episodio, varios defensores se ofrecieron a tomar su caso. Por su parte, el jefe del Sindicato de Periodistas en Irak, Mouyyad al-Lami, le pidió al gobierno iraquí mostrar clemencia.

Muchos iraquíes y árabes se han lanzado a las calles para pedir la liberación del reportero, considerado ya un héroe en su patria y medio oriente.


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