Breve complemento vegano al artículo “Conozca los alimentos funcionales y su aporte a nuestra salud”

Alejandro Ayala Polanco, fundador de Homo Vegetus y representante en Chile de la Unión Vegetariana Internacional y de la Unión Vegetariana Latinoamericana, complementa brevemente -a petición de El Ciudadano– el artículo de Claudia Pedreros “Conozca los alimentos funcionales y su aporte a nuestra salud”, publicado el 23 de febrero pasado en este mismo sitio web.

Homo Vegetus es un movimiento nacido el 2002, que busca la transformación de conciencia desde la violencia al respeto y desde la competencia a la cooperación, siendo el veganismo una práctica fundamental en este tránsito.

El veganismo nos permite alinearnos con nuestros valores más elevados, como el respeto por todos los seres sintientes. Muchas personas dicen amar a los animales. Sin embargo, protegen a unos (perros y gatos) y pagan por el sufrimiento/muerte de otros (vacas, cerdos, peces, etc.). El veganismo es una práctica que permite superar esa desconexión (o esquizofrenia moral).

Cada vez son más las personas que toman conciencia de que habitamos en un universo interdependiente, que nuestras acciones implican consecuencias no sólo en nosotros sino que también en nuestro entorno y en el resto de co-habitantes del planeta, humanos y animales.

Es así como desde el veganismo, se ofrece la oportunidad de desarrollar un estilo de vida de respeto por todos los seres sintientes. Lo cual implica, entre otros compromisos, la adopción de una dieta 100% vegetal.

Algo que muchas veces se ignora, es que dicha conciencia y su correspondiente estilo de vida, no es opuesto sino que puede volverse coincidente con el cuidado de nuestra salud.

Cada uno de los nutrientes necesarios son posibles de obtener en una dieta ausente de alimentos de origen animal.

La linaza, por ejemplo, contiene ácidos grasos como el Omega 3 y 6. La levadura de cerveza provee todo el complejo B y elevadísimas cantidades de Hierro. El brócoli es una fuente confiable de calcio, al igual que los frutos secos.

Hablamos de fuentes confiables de calcio, dado que se ha demostrado que la leche de origen animal en lugar de protegernos de la osteoporosis puede resultar siendo causa de ésta al descalsificarnos. Sin mencionar otros peligros provenientes de su aporte excesivo de proteínas y de la ingestión de hormonas cancerígenas.

En general, podemos mencionar que la dieta vegetal está libre de colesterol, es baja en grasas saturadas, es rica en fibra -la cual reduce los niveles de colesterol, mejora el control del azúcar presente en la sangre y reduce los riesgos de desórdenes gastro-intestinales. Además, es fuente de antioxidantes como la vitamina C, la vitamina E y beta carotenos, los cuales nos protegen del daño de los radicales libres. Más aún, la dieta vegetal provee de todo un arsenal para la protección de la salud, el cual está completamente ausente en los alimentos de origen animal: los fito-químicos.

Es así como el estilo de vida vegano demuestra ser no sólo una opción consistente en el ejercicio del respeto por todos los seres sintientes y por el planeta, sino que una configuración dietética funcional.

Por Alejandro Ayala Polanco

Noticia relacionada: http://www.elciudadano.cl/2010/11/01/1%C2%B0-de-noviembre-dia-internacional-del-veganismo/