Lavrov advierte a EE. UU. que la democracia “no se establece por la fuerza”

Pompeo dijo que “es hora de que Maduro (el presidente constitucional de Venezuela) se vaya”

El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, aseveró que la posición de Moscú respecto a la situación en Venezuela se basa en la premisa de que «la democracia no se establece por la fuerza».

Esta declaración fue realizada por el canciller ruso después de su reunión con el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, celebrada en la ciudad rusa de Sochi, destacó el portal de noticias Rusia Today.

El jefe de la diplomacia rusa señaló, además, que Venezuela aboga por «el apoyo del diálogo y la consideración de todas las cuestiones por los propios venezolanos, sin ultimátums y sin condiciones previas«.

De esta manera respondió Lavrov a la posición del Gobierno de los Estados Unidos, que en la persona de su Secretario de Estado, Mike Pompeo, pidió a su homólogo ruso, que ese país deje de apoyar al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, petición que fue rechazada.

Pompeo: “Es hora de que Maduro se vaya”

«Estados Unidos y más de 50 países consideran que ha llegado la hora de que Maduro deje el poder», señaló Pompeo, en una rueda de prensa conjunta con Lavrov en el balneario de Sochi, en el mar Negro, destacó, por su parte, NotiAmérica.

Pompeo, cuyo país respalda al autoproclamado “presidente encargado” de Venezuela, Juan Guaidó, que preside la Asamblea Nacional (AN) en desacato y que ha sido reconocido como presidente de ese país por más de 50 naciones, de las más de 190 naciones que forman parte de la ONU, cree que Maduro debe renunciar.

«Llegó la hora de que Nicolás Maduro se vaya, solo le ha causado miseria al pueblo venezolano, y esperamos que el apoyo ruso a Maduro cese», apuntó.

Lavrov respondió que «las amenazas contra el Gobierno de Maduro, que se escuchan de los representantes oficiales de la Administración estadounidense y de Guaidó, que constantemente recuerda su derecho a invitar a la intervención armada desde el exterior, no tienen nada en común con la democracia».

«Creo que no debo detallar más cómo están las cosas con la democracia en Irak y Libia y en otros sitios, donde esos intentos de derrocamiento tuvieron lugar y no llevaron a nada bueno», enfatizó.

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