El amor de los topillos sirve de modelo para estudiar la actividad romántica en el cerebro
-Los topillos norteamericanos son una especie que prácticamente ha perfeccionado la monogamia: se emparejan para toda la vida, comparten las tareas del nido y tienen roles igualitarios en la crianza.
-El estudio encontró que cuando una relación empieza a echar raíces, el circuito de recompensa del cerebro comienza a trabajar a toda marcha, incrementando rápidamente el valor que damos al individuo de nuestro interés.