Así Guaidó robó millones de dólares a una Fundación que atiende a niños enfermos (I)

Roland Oswaldo Carreño Gutiérrez pasó de ser un comunicador dedicado a la farándula venezolana a convertirse en el principal operador financiero del grupo extremista Voluntad Popular. Su función era controlar el dinero robado a la Fundación Simón Bolívar de la refinería estatal CITGO. Esta organización se dedica a atender a niños venezolanos con enfermedades graves y ahora no recibe ese apoyo.

A Carreño se le conoce por haber sido uno de los animadores del programa de televisión “Buenas noches”. Se graduó en la Universidad Católica Andrés Bello y compartió su carrera en programas especializados en la llamada «prensa rosa». En otras palabras, se dedicó a contar la vida de artistas y personajes de «la alta sociedad». Eso, además de difundir chismes, rumores y generar matrices de opinión para generar «noticias» de la farándula.

Su «prontuario» farandulero

Carreño fue director editorial de la edición venezolana de la revista de modas ¡Hola! También fue jefe de la sección de sociales del diario El Nacional y director de la revista Pandora. Trabajó en el programa Modelos 2003 del canal Televen y formó parte del programa de televisión Show Bussines. Adicionalmente, es socio y editor de la revista Blitz.

En el ámbito político, siempre ha sido opositor al chavismo y actualmente al Gobierno de Nicolás Maduro. En 2015, fue candidato de la derecha para las elecciones parlamentarias, representando al entonces partido político Voluntad Popular. Esta agrupación se convirtió en un reducto sedicioso, promotor del terrorismo y partícipe del plan que intenta crear un Estado paralelo en Venezuela. Además, es cómplice del robo de miles de millones de dólares del Estado venezolano, secuestrados en el mercado financiero internacional.

Voluntad Popular fue fundado por el prófugo de la justicia venezolana Leopoldo López y en él milita actualmente Juan Guaidó. Allí, Carreño fungía como «el coordinador operativo», responsable de pagar a las personas involucradas en las acciones violentas.

Captura en flagrancia de Carreño

Días atrás, Carreño fue capturado por las autoridades venezolanas cuando se disponía a entregar 12.000 dólares que llevaba en efectivo. Eso, además de un lote de armas de guerra tipo AR15 que serían -presuntamente- utilizadas para generar acciones violentas.

Al respecto, el fiscal General de Venezuela, Tarek William Saab, confirmó que Carreño fue detenido en flagrancia. Inmediatamente, se le privó de libertad por la presunta comisión de los delitos de conspiración, tráfico ilícito de armas de guerra y financiamiento al terrorismo.

Saab acotó que a Carreño se le encontraron varios documentos. Uno de ellos detalla la distribución -entre cuatro partidos políticos- de 8,5 millones de dólares. Estos fueron entregados por la administración que actualmente usurpa la Fundación Simón Bolívar, que hoy controla Voluntad Popular, con la complicidad de Donald Trump.

Terrorismo con dinero para niños enfermos

El Fiscal General acotó que cada seis meses, las personas que controlan la Fundación hacen un envío a cuatro partidos. Esas son las mismas personas que recientemente afirmaron carecer de recursos para atender a los pacientes que recibían el apoyo. Incluso, han dejado a niños expuestos a la muerte, como el caso de los infantes que están en Argentina.

«Para esto fue que el Gobierno estadounidense les entregó CITGO, para usarla como fuente de financiamiento de sus ataques. Esta fundación se creó en 2006 para proporcionar asistencia médica y humanitaria a pacientes necesitados. Pero, ahora es utilizada por este grupo de conspiradores como caja chica para sus actividades. El documento encontrado detalla que de esos 8,5 millones de dólares, se entregaron 733.000 a Voluntad Popular, Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo, Acción Democrática y un quinto partido con fuerza regional», denunció Saab.

«Esa suma se entregaba cada seis meses y se encontró en el celular en poder de Carreño, privado de libertad en horas de la madrugada del jueves 29 de octubre», añadió. Asimismo, precisó que su detención se logró «tras ser denunciado por una persona de su entorno, quien informó de sus actividades ilícitas».

Saab agregó que «se le capturó portando en su vehículo un maletín con un fusil AR-15 con los seriales devastados. También tenía 12.000 dólares en efectivo y documentos con listas de personas y rutas hacia Colombia. Cuando se le preguntó sobre el maletín y su contenido, Carreño confesó que era de su propiedad y que el ciudadano que lo acompañaba solo era un conductor contratado para manejar su vehículo».

Evidencia recabada contra Carreño

Igualmente, se le allanó su vivienda, con presencia de un fiscal del Ministerio Público. Luego, con el vaciado de su teléfono se pudo conocer que este dirigente político es quizás «el principal operador financiero de Voluntad Popular en el país».

«Se trata de una facción política que se ha dedicado desde 2014 a promover actos violentos como la quema de personas e instituciones, el uso reprochable de menores de edad en actos de violencia en los que han fallecido venezolanos. Sabemos que Voluntad Popular es un grupo violento y sin escrúpulos para financiar operaciones como la Gedeón«, subrayó.

El Fiscal General detalló que en el teléfono encontraron conversaciones en las que se reparten más de $ 60.000 a operaciones dedicadas a la conspiración. También se detalla la entrega de $ 15.000 a los coordinadores nacionales de los partidos. (…) Además, hay evidencia de que la Fundación Simón Bolívar destina esta suma de dinero cada seis meses a esos partidos».

«Hay una enorme cantidad de evidencia recabada que está siendo procesada. Pero, tras la detención y el allanamiento, queda claro que Carreño es el encargado de repartir dinero que financia a los grupos que tratan de sumir a Venezuela en un conflicto», recalcó.

En la siguiente entrega se ofrecerán más detalles sobre cómo utilizó Carreño el dinero robado y cómo las investigaciones lo vinculan a delitos como enriquecimiento ilícito, prostitución, financiamiento al terrorismo, sedición, conspiración, aprovechamiento, corrupción, entre otros delitos.

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